El fabricante coreano promete convertir su nuevo 'smartphone' en el más vendido de este año. El modelo 'mata iPhone' amplía su pantalla, añade velocidad y multiplica sus prestaciones multimediaTanto tiempo esperando al mata iPhone y parece que ya está aquí. Se llama Samsung Galaxy S4 y ya se puede tocar. La nueva estrella de la industria del móvil llegará a las tiendas a principios de mayo, con un precio en torno a los 550 euros, pero ayer exhibió las credenciales con las que confía consolidar el liderazgo mundial del fabricante surcoreano. Se trata de la nueva pesadilla de Apple ya que los expertos consideran que será el smartphone más vendido de 2013. Por si fuera poco lo anterior, la evolución bajista en bolsa de Apple coincide en estas fechas con el despegue de su principal competidor. Ante el dulce momento del gigante asiático, los analistas ya hablan de cambio de ciclo en la firma de la manzana. Precisamente, el nuevo rey de la galaxia de los móviles inteligentes deslumbró anoche en el Radio Music Hall de la neoyorquina Times Square, en el corazón de la capital del mundo, en una puesta en escena que viene a representar el poderío y la ambición de una compañía convencida de que su modelo S4 ganará a Apple en todos los terrenos, empezando desde la propia casa de su rival. La cuarta entrega de la saga de los Galaxy ofrece una apuesta tan sólida como previsible. La estrategia es la misma que ha conducido al éxito al gigante asiático en los últimos años: acomodar los mejores componentes disponibles en un conjunto capaz de seducir a decenas de millones de usuarios, cada vez más exigentes y entendidos. Al cierre de esta edición no se habían concretado las especificaciones técnicas del dispositivo, aunque no hace falta arriesgarse mucho para aventurar que si la calidad de la pantalla anterior ya era excelente, ahora no sólo es mejor, sino que también es apreciablemente más grande, hasta las casi cinco pulgadas (1920 x 1080), con tecnología Full HD Super Amoled. Parecido al 'Note II' Si el procesador anterior ya era uno de los más avanzados del sector, ahora prevé elevar sus prestaciones con un microprocesador Quad Exynos 5450, de ocho núcleos, con 2 GB de memoria RAM (teóricamente dos veces más poderoso que el del iPhone 5). Como no puede ser de otra forma, la cámara de fotos emprende un salto hasta los 13 megapíxeles (con una óptica frontal de dos megapíxeles), capaz de grabar vídeo en Full HD. Sobre la batería dicen que es mucho más duradera que la de sus iguales y el sistema operativo que rige la máquina es el más inteligente de la familia Android, ahora con la versión 4.2.2, conocida como Jelly Bean. También es seguro que el nuevo equipo incorpora la conectividad LTE, de super banda ancha móvil, además de HSPA+, GSM, GPRS, Edge, A-GPS y Glonass. Tampoco faltará la tecnología NFC para realizar micropagos seguros a través de radiofrecuencia. Además, se da por hecho que el equipo tendrá altavoz frontal, Bluetooth 5.0 y que llegará en colores blanco y negro, en versiones de 16, 32 y 64 GB de capacidad de almacenamiento. Las habilidades del equipo Galaxy Note II también se incorporan al nuevo Galaxy S4, como la capacidad para crear anotaciones sobre la pantalla, retocar fotografías con un potente software de edición y crear vídeos y animaciones casi sobre la marcha. A lo anterior hay que añadir decenas de pequeños detalle, como el afinamiento del sistema de seguimiento de ojos sobre la pantalla, ya probado en el Galaxy S3. También es seguro que el dispositivo incluye las patentes de Samsung: S-Art, S-Planner y S-Choice. También añade el sistema S-Pen, teclado qwerty virtual y el software Swype de escritura rápida. Estas sugerentes novedades cautivan en las distancias cortas y engatusan a los usuarios hasta convertirlos en prescriptores. En eso ya está todo inventado: al final, el boca a boca siempre es más efectivo que la más generosa campaña de marketing, y eso es mucho decir tratándose de Samsung, cuyo entusiasmo económico para posicionar su marca es la envidia del negocio. Los analistas de Asymc aseguran que el presupuesto promocional de Samsung en 2012 fue superior a la suma conjunta de Apple, Microsoft, Hewlett-Packard, Dell y Coca-Cola. A primer vistazo, el móvil ofrece todos los argumentos para prolongar la feliz trayectoria descrita por sus antecesores. El departamento de innovación de Samsung se ha ganado el sueldo con propuestas que abren nuevos caminos para la industria, como las capacidades multimedia del equipo y su habilidad para comunicarse con otros dispositivos. En cuestión de diseño, Samsung ha avanzado con pies de plomo y ha renunciado a posibles piruetas para no encarecer el producto con materiales más nobles que el plástico, con el que parece conformarse. Hasta la fecha no le ha ido mal. Como es conocido, Samsung ha llegado a lo más alto del negocio de la telefonía móvil y ahora afronta un reto aún más exigente que el hecho de haberse encumbrado en la cima de su industria: mantener su hegemonía y soportar la presión de los líderes. En ese estado de máxima exigencia irrumpe ahora con un modelo que evoluciona lo mejor de sus virtuosos hermanos. Pantalla más grande, de casi cinco pulgadas, pero sin que ello afecte de forma sustancial a su tamaño. Para lograr la cuadratura del círculo, los diseñadores han reducido la carcasa del smartphone todo lo posible para ganar el máximo espacio operativo. Madruga más que su rival El nuevo buque insignia del fabricante coreano se aprovecha de una circunstancia que puede resultar determinante en su sector: nace en primavera, mientras que la próxima versión del iPhone lo hará casi seguro a principios de otoño. El tiempo juega a favor de los coreanos, elemento que podría arrebatar un gran número de usuarios de Apple para su causa. Hasta que los estrategas de Cupertino muevan pieza, el smartphone de referencia de Samsung dispone de toda la primavera y verano para sacar ventaja a su inmediato perseguidor. En pocas semanas, los usuarios más impacientes podrán reservar la compra, con el reto de superar la marca de S3, que en apenas 15 días sumó más de nueve millones de órdenes de prerregistros. Los ahora antecedentes son muy favorables, ya que la pujanza de los hermanos del Galaxy 4 fue colosal. El modelo Galaxy S3 ya ha vendido más de 50 millones de unidades, lo que viene a ser casi la mitad que el resto de los Galaxy anteriores, que ya superan los 100 millones de dispositivos. Los últimos datos de la consultora IDC apuntan que Samsung vendió casi 216 millones de dispositivos durante 2012, con un crecimiento de casi el 130 por ciento respecto al año anterior. Con semejante crecimiento es lógico que Apple considere a Samsung como su peor pesadilla.