El corredor global de seguros Willis sufrió pérdidas netas 446 millones de dólares (342,4 millones de euros) el pasado año, frente a 203 millones de beneficios el ejercicio anterior (155,86 millones de euros) por culpa de varios impactos extraordinarios. Los 'números rojos' se originan tras encajar 804 millones de pérdidas en el último trimestre (617,21 millones de euros) por numerosos cargos. La mayor partida fueron los 492 millones de dólares destinados a sanear el fondo de comercio en América del Norte, pero también cargó 565 millones adicionales a distintos ajustes relacionados con bonos y regulaciones fiscales. Sin los extraordinarios, Willis hubiese reportado una ganancia plana de 79 millones, donde los mayores ingresos se mitigaron con el aumento del pago en salarios e impuestos. Los ingresos totales del corredor se incrementaron en un 1,28 por ciento en el año y ascendieron a 3,48 billones de dólares (2,67 billones de euros). Si se excluye el impacto negativo del 1,8 por ciento por el cambio de divisas, la expansión en recaudación de comisiones y honorarios sería del 3,1 por ciento. El grupo se propone eliminar 200 empleos fijos para ahorrar hasta 30 millones de dólares anuales.