Debutará en el mercado para dar liquidez a los inversores de preferentes sin captar capital La valoración del grupo se estima en unos 1.000 millones tras el traspaso de activos al 'banco malo'Liberbank ha puesto el acelerador para cumplir con su plan de saneamiento antes del plazo otorgado por la Comisión Europea, según fuentes financieras conocedoras de la situación. La intención del grupo liderado por Cajastur es debutar en la bolsa española a finales de abril o principios de mayo, es decir, sin agotar el calendario para implementar el proyecto, que extendía hasta finales de junio. La operación de Liberbank consiste en empezar a cotizar a través del sistema listing, es decir, que no captará capital nuevo y que servirá para dar liquidez a los tenedores de participaciones preferentes y subordinadas, instrumentos que se convertirán en acciones de la entidad con quitas cercanas al 50 por ciento en algunos casos. Fuentes oficiales del banco liderado por Manuel Menéndez no quisieron hacer comentarios a esta información y se limitaron a señalar que la salida a bolsa es un compromiso pactado con Bruselas para recapitalizarse tras los test de estrés elaborados por Oliver Wyman el pasado septiembre. La hoja de ruta de Liberbank establece que durante la primera quincena de marzo se dé el visto bueno al folleto informativo de la operación por parte del regulador bursátil, que será el pistoletazo para culminar en el plazo de mes y medio todas las conversiones de productos híbridos por títulos. La salida a bolsa es más simple que en una oferta pública de acciones (OPV) tradicional, ya que no busca inversores nuevos. A través de listing debutaron en el pasado otras compañías españolas, como por ejemplo, Banco Sabadell y la cadena de televisión Antena 3. Además, el grupo ya cuenta con una valoración oficial de su negocio. El Frob determinó a principios de febrero un valor de 1.113 millones. Barclays y Renta 4, asesores La entidad ha contratado a Barclays y Renta 4 como asesores del plan de salida al mercado, que aún está en fase de negociación con la CNMV para determinar algunos flecos. Uno de los aspectos que aún se mantiene en el aire es la conversión de las participaciones preferentes y subordinadas en manos de los particulares. Los instituciones sufrirán la quita correspondiente en la inversión de estos productos, que se transformarán en acciones. Pero para los minoritarios las autoridades han dado más margen de actuación. Lo que no han permitido es reembolsar el dinero en efectivo a través de depósitos u otros productos similares, tal y como tenía previsto Liberbank en un principio. Entre las opciones que existen para los particulares, según los analistas, se encuentra un mix de conversión, es decir, parte en acciones como para los instituciones y otra parte en bonos convertibles en títulos con una rentabilidad determinada. Liberbank cuenta con preferentes y subordinadas por importe nominal de 900 millones de euros, procedentes de las cajas accionistas del grupo (Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura). Del total, 575 millones están en manos de particulares y los restantes 325 millones son propiedad de los institucionales. Estos accionistas tendrán algo más del 25 por ciento del capital de la entidad tras el estreno en el mercado continuo español. La operación nada tiene que ver con las protagonizadas a medidados de 2011 por Bankia o Banca Cívica. Como medida para llevar a cabo la operación, Liberbank anunció ayer una reducción del capital de 1.000 millones a 300 millones, con un posterior aumento de las reservas voluntarias por importe de 700 millones. El nominal de las acciones queda fijado en 0,3 euros, frente al euro anterior. Sareb y ayudas La salida a bolsa se produce una vez que Liberbank ha transferido al banco malo o Sareb activos inmobiliarios por importe de 2.900 millones netos de provisiones. De esta manera, su balance ronda los 45.000 millones de euros, cifra inferior a la de Bankinter y superior a la del nacionalizado Banco de Valencia, ambos presentes en bolsa. En el grupo se incluyen los negocios de CCM, que fueron adjudicados en 2010 con un esquema de protección de pérdidas por importe de 2.475 millones. Su debut también tendrá lugar después de que Liberbank haya recibido 124 millones de euros de ayudas públicas a través de bonos convertibles en acciones. La entidad que preside Menéndez tiene previsto devolverla en un corto plazo, menor a dos años. A cambio de estas ayudas, Liberbank tendrá que llevar a cabo un pequeño ajuste de plantilla y oficinas y reducir algo más su tamaño, hasta unos 38.000 millones de activos en balance. El proyecto de saneamiento se debe a las necesidades de capital por valor de 1.1000 millones calculadas por Oliver Wyman. Fruto del mismo, Ibercaja rompió su fusión.