La Federación Española de Baloncesto saca músculo con las nuevas tecnologías para la organización del próximo Mundial en 2014. Por Ismael LabradorUn balón de baloncesto y un teléfono móvil. Con estos dos ingredientes la Federación Española de Baloncesto (FEB) ultima los últimos detalles de la organización de la Copa del Mundo, que tendrá lugar el próximo año en España. En el aspecto deportivo se trata de un desafío para que el baloncesto español vuelva a revivir el éxito internacional en casa. En el tecnológico, el objetivo pasa por convertir la competición en el primer Mundial smartphone de la historia. "Estamos en negociaciones con varias empresas para aprovechar todo el potencial que las nuevas tecnologías pueden ofrecer a la organización de un evento deportivo y su disfrute por parte de los aficionados, en especial lo que respecta a las aplicaciones para smart- phones. Queremos que cualquier persona que venga a España a seguir el Mundial pueda hacerlo con un calzado cómodo y un teléfono móvil". Así explicaba el pasado miércoles Miguel de la Villa, director del Comité Organizador de la Copa del Mundo de Baloncesto 2014, la apuesta que tiene sobre la mesa a los socios comerciales, patrocinadores y directivos de la FIBA que se reunieron en Alcobendas con los dirigentes de la FEB para conocer de primera mano los aspectos que rodean la organización del evento. Oportunidad para 'start-ups' El crecimiento que ha experimentado en los últimos tiempos el segmento de las aplicaciones móviles es una de las piedras angulares de la Copa del Mundo. "Hoy día el teléfono móvil puede funcionar como una tarjeta de embarque para coger un avión, ¿por qué no aprovecharlo también para comprar entradas para un evento deportivo? A través de las apps se pueden ofrecer servicios de todo tipo. Imagina un extranjero que quiere venir a ver la Copa del Mundo y, gracias a una única aplicación, puede reservar vuelo, hotel, conocer los monumentos más turísticos de cada sede, reservar una localidad y tener los datos de todos los equipos y jugadores. También podemos aprovechar las retransmisiones en streaming para ver los partidos vía Internet". Actualmente, la FEB está ultimando los requerimientos de las soluciones tecnológicas que quiere llevar a cabo y en las próximas semanas sacará un concurso público en busca de proveedores que las desarrollen, con lo que la Copa del Mundo de baloncesto puede convertirse en un nicho de negocio para start-ups del sector de las aplicaciones móviles que operan en el mercado español. Un balón en cada casa Si la tecnología es una de las piedras angulares para proporcionar una mayor comodidad y accesibilidad a aficionados y espectadores, la Responsabilidad Social Corporativa es el eje que centra las actuaciones de la FEB con los socios comerciales y patrocinadores de la Copa del Mundo 2014. Su presidente, José Luis Sáez, explica que "no queremos que este evento se limite a los quince días de competición ni a las sedes donde se juegan los partidos, a partir de este momento se amplía el evento de dos semanas a 500 días". El próximo 30 de abril es la fecha que dé inicio a esos 500 días previos a la inauguración oficial de la Copa del Mundo. Será entonces cuando la FEB ponga en marcha un ambicioso plan "para llevar el baloncesto a todos los rincones de España. Queremos que haya un balón en cada casa". Una de las acciones de este plan es el denominado Roadshow, una caravana itinerante que pasará por distintas ciudades invitando a niños y jóvenes a participar en torneos de 3x3 y otras actividades relacionadas con el mundo de la canasta. Paralelamente, también se llevarán a cabo actividades sociales en las que los patrocinadores de la FEB estarán vinculados. Una de las empresas que más tiempo lleva patrocinando a la Selección española de baloncesto es San Miguel. "Entramos en 2006, coincidiendo con la victoria de España en el Mundial", recuerda Javier Herrero-Velarde, director de marketing del Grupo Mahou-San Miguel: "Desde entonces hemos seguido con ellos, no sólo por la visibilidad que proporciona la Selección, sino porque obtienes una serie de valores de índole social y de compromiso gracias a diversas acciones. Nosotros participamos en los eventos de acercar el baloncesto a la calle y llevamos a cabo acciones sociales en cárceles para formar a los reclusos que quieran ser hosteleros o árbitros de baloncesto". Para Herrero-Velarde, "esto es lo más atractivo de un patrocinio, porque al menos en nuestro caso no queremos simplemente llevar la pegatina de San Miguel en la camiseta, sino tener un compromiso".