Los trabajadores se concentran en la T4 y se cancelan 240 vuelosLa primera semana de la huelga de Iberia terminó ayer. A partir de hoy se abre un periodo de calma de nueve días que la aerolínea y los trabajadores aprovecharán para tratar de llegar a un acuerdo con el que resolver el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 3.800 personas y poner fin a los paros programados (quedan diez días más repartidos en dos semanas alternas). Así, los primeros cinco días de paros arrojan un balance negativo para la compañía, pero esperanzador para el futuro del conflicto. Por un lado, Iberia cierra la semana con pérdidas de 50 millones de euros y más de 414 vuelos cancelados, unos 85 diarios. Cifra que se eleva hasta los 1.220 si se incluyen todas las aerolíneas del grupo a las que Iberia da el servicio de handling como Iberia Express, Air Nostrum y Vueling. Por el lado del conflicto, la semana ha terminado con un atisbo de pacto en el horizonte. Por una parte, la compañía y los sindicatos mayoritarios (CCOO y UGT) han recuperado el modelo de negociación más informal y están intensificando las conversiones paralelas para tratar de acercar posturas sobre el plan de ajuste y parar la huelga. A su vez, visto que por la vía oficial no hay avances, sindicatos e Iberia han aceptado sentarse ante un mediador para solucionar el conflicto sin tener que llegar a un arbitraje. De momento el mediador, el catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid Gregorio Tudela, no ha convocado a las partes para una primera reunión y se espera que lo haga en los próximos días. En este sentido, Tudela dijo ayer que "agradecería cualquier gesto" por parte de los sindicatos y de la dirección de la aerolínea "que permitiera una mediación serena". Por su parte, los trabajadores tomaron ayer la T4 y, según informan fuentes sindicales, el seguimiento de la huelga ha sido del 78 por ciento. A su vez, los representantes prevén seguir con las movilizaciones ya que, "una sola huelga no ha sido suficiente y hay que seguir haciendo ruido".