Justo el día en que la Comisión Nacional de la Energía denuncia una "estrategia común" de fijación de precios de carburantes por parte de las petroleras, el Gobierno adopta medidas para atajar esta situación y controlar los precios de las gasolinas, que han subido un 1,5 por ciento en una semana y se encuentran en niveles récord. El Consejo de Ministros aprobó ayer prohibir las recomendaciones de precio de venta al público que hacen las petroleras a sus estaciones de servicio. Según el Ejecutivo, el precio recomendado o el precio máximo son parámetros fundamentales en el establecimiento del precio de adquisición del producto, "fomentando la alineación de precios entre estaciones de servicio abanderadas y reduciéndose así la competencia". El Gobierno también limita la duración de los contratos en exclusiva e impulsa medidas para favorecer nuevas instalaciones de suministro, con la eliminación de barreras administrativas, simplificación de trámites a la apertura de nuevas instalaciones de suministro minorista de carburantes y fomentar la entrada de nuevos operadores. En concreto, con estas medidas se quiere potenciar la apertura de estaciones de servicio en centros comerciales, establecimientos de inspección técnica de vehículos y zonas o polígonos industriales. Más estaciones en híper Para ello, se hará compatible el uso de suelo para actividades comerciales en estas áreas y que la superficie de la estación de servicio no computará como superficie útil de exposición de venta al público, lo que "aumentará el atractivo para que opten por la instalación en este tipo de áreas". Asimismo, se establece un procedimiento único en todas las comunidades autónomas para la apertura de nuevas estaciones de servicio, procedimiento que coordinará todos los trámites administrativos que deberán resolverse en un plazo máximo de 8 meses, agilizando la concesión de licencias. De cara a equilibrar el mercado, también se limitará, de manera transitoria, el crecimiento en número de instalaciones de venta de productos petrolíferos a los principales operadores de cada provincia. Asimismo, el Gobierno aprobó ayer medidas para el mercado mayorista para garantizar que la eficiencia de la logística de hidrocarburos permita que los costes de distribución sean los más bajos posibles. Por este motivo, se profundiza en el régimen de supervisión de las instalaciones logísticas y de almacenamiento que tienen obligación de acceso a terceros en condiciones transparentes, objetivas y no discriminatorias, lo que permitirá a las administraciones públicas seguir adecuadamente la actividad desarrollada por estas compañías y su incidencia en la competencia de mercado. Estas modificaciones en el sector se vienen anunciando desde el pasado mes de septiembre, ante el crecimiento que experimentaron los carburantes. El Gobierno solicitó tanto a la CNE como a Competencia sendos informes sobre esta actividad y constataron el mayor nivel de precios antes de impuestos de los carburantes en España respecto a Europa y la reducida competencia efectiva del mercado de distribución de carburantes.