La eléctrica se desprenderá de 184 MW por cerca de 250 millones de eurosIberdrola continúa con su proceso desinversor y está a punto de cerrar un nuevo hito con la venta de sus parques eólicos en Polonia, una operación que puede cerrarse esta próxima semana. Un consorcio formado por la empresa estatal polaca PGE y Energa pujan por estos activos, valorados en 250 millones. Desde la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán no quisieron hacer ningún comentario sobre una posible venta de sus activos en Polonia, donde el grupo cuenta con una capacidad total de 184 megavatios repartidos en cinco parques. Según indicó ayer Bloomberg, la negociaciones se encuentran en una fase muy avanzada y la operación está a punto de cerrarse. PGE y Energa quieren ampliar su presencia en el sector eólico. Esta misma semana han anunciado su intención de comprar los parques eólicos de la danesa Dong por 320,4 millones de dólares (243 millones de euros). Tanto la eventual venta de Dong como la de Iberdrola debe contar con el visto bueno del regulador energético del país. Por su parte, la alemana RWE también podría haber presentado una oferta tanto por los activos del grupo español como por los de la danesa, pero parece que su oferta no va por el mejor camino. La compañía alemana se ha limitado a decir que sigue de cerca el mercado polaco, ya que quiere tener un total de 300 megavatios de capacidad de energía eólica en 2015. Polonia tiene alrededor de 2.500 MW de capacidad eólica instalada. El problema de estas transacciones es que llegan en un momento en el que el Gobierno polaco está reformando su sistema de apoyos a las energías renovables, lo que hace temer por la seguridad jurídica. Los planes de Iberdrola pasan por cerrar un plan de desinversiones de 2.000 millones hasta 2014 en activos no estratégicos y ya ha completado el 40 por ciento del mismo. 60 años de vida nuclear Por otro lado, la eléctrica y Endesa, propietarias de la nuclear de Garoña, han mantenido conversaciones con el Ministerio de Industria sobre la posibilidad de fijar un periodo de vida útil de 60 años para el conjunto de las centrales atómicas. Con esta concesión sería suficiente para continuar con la central de Garoña, según Ep, ya que permitiría establecer un calendario de amortización de las inversiones necesarias para adaptar la planta a las exigencias tras el accidente de Fukushima e incluso procurar rentabilidad a pesar de los nuevos impuestos. Las eléctricas se negaban a continuar con la planta debido a las nuevas tasas de la reforma energética, pero con este mayor plazo de operación la central resultaría económicamente viable. Emisión de bonos perpetuos Iberdrola colocó en el mercado 525 millones en títulos perpetuos con ventanas de amortización cada cinco años poniendo de manifiesto el apetito de los inversores por productos de mayor riesgo y abriendo el mercado de bonos híbridos en España. La eléctrica, que usará los fondos de la emisión para financiar una recompra de acciones en autocartera, colocó los títulos con un cupón del 5,75 por ciento, equivalente a aplicar un diferencial de 481 puntos básicos sobre los mid-swaps.