Hacienda restringirá la emisión de deuda de las CCAA, cuyo coste no podrá superar en 100 puntos básicos al del TesoroNo hubo sorpresas en cuanto a la cifra de déficit público de 2012. Tal y como adelantó elEconomista, el desfase presupuestario del pasado ejercicio fue inferior al 7 por ciento del PIB, frente al 6,3 por ciento comprometido con Bruselas. Lo anunció ayer el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante el Debate del Estado de la Nación. Así, a falta de las cifras definitivas, en 2012 el déficit se redujo en 21.000 millones: la mitad por los mayores ingresos y la otra mitad por el recorte de gasto. Algunos expertos apuntan otros factores embellecedores de la cifra final, entre ellos, los pagos fraccionados de Sociedades, los retrasos en la devolución de impuestos o el aplazamiento del abono de facturas, una práctica a la que recurrieron las comunidades autónomas el año pasado. Pese al buen dato de déficit, Rajoy advirtió ayer que no se pueden lanzar campanas al vuelo. Queda mucho por enderezar en las cuentas públicas, vino a decir el presidente. Y uno de los frentes en los que el Gobierno trabaja es el del desbarajuste autonómico, para el que Hacienda prepara un endurecimiento en la emisión de deuda. El objetivo es restringir el acceso directo de las CCAA a los mercados, incluso de aquellas que sí cumplan la meta de déficit. Ninguna podría emitir deuda cuyo coste supere en 100 puntos básicos el coste de emisión del Tesoro. Mientras tanto, mañana, viernes, la Comisión Europea publicará las previsiones económicas de invierno, en base a las cuales decidirá si da más tiempo a los Estados miembros de la UE con déficit excesivo para reducir sus cifras. Según ha informado el vicepresidente del Ejecutivo comunitario y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, su equipo tendrá en cuenta los nuevos datos de crecimiento, que apuntan a que no se producirá una recuperación hasta fin de año. Las estimaciones de la oficina europea de estadísticas, Eurostat, son que el PIB cayó un 0,6 por ciento en la zona del euro y un 0,5 por ciento en la UE durante el cuarto trimestre de 2012. Un recrudecimiento de la recesión que se notó también en España, con una caída mayor (-0,7 por ciento) entre octubre y diciembre respecto a la de otros trimestres (-0,4 por ciento en el primero y segundo y un -0,3 por ciento en el tercero). Con estos datos, todo indica que será imposible cumplir el calendario fijado para el déficit español, que establece un 4,5 por ciento en 2013 y un 2,8 por ciento para 2014. Por ello, los analistas ya apuntan la posibilidad de que España no sólo goce de un año más de margen para situarse por debajo del 3 por ciento de límite establecido por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, sino incluso dos. Y si España lo logra, el Gobierno lo repartirá con las autonomías, que también se verían beneficiadas de esa mano ancha europea. La Comisión será flexible. "La situación varía sustancialmente entre los Estados y por eso aplicamos un enfoque diferenciado a la consolidación y tenemos en cuenta los retos específicos de cada país al determinar el esfuerzo fiscal estructural necesario", dijo esta semana Rehn. "Si el crecimiento se deteriora de forma inesperada, un país puede recibir más tiempo para corregir su déficit excesivo, siempre que haya cumplido el esfuerzo fiscal estructural acordado", manifestó.