Estudiar y pagar un alquiler, incluso aunque se trate de un piso compartido, puede convertirse en una meta inalcanzable para muchos universitarios que se ven obligados a desplazarse de sus localidades de residencia para poder cursar su formación universitaria. La cosa cambia mucho si los estudiantes tienen la opción de poder aportar algo que compensase los gastos de alojamiento. Sobre esta idea se puso a trabajar la sociedad pública Viviendas Municipales, dependiente del Ayuntamiento de Bilbao. Así hace tres años llegó a un acuerdo con la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y que ahora extiende a los alumnos de la Universidad de Deusto, para facilitar alquileres de pisos compartidos para estudiantes a precios muy baratos a cambio de que los jóvenes realicen actividades de voluntariado. La ecuación ha terminado siendo un programa por el cual los estudiantes pagan la cantidad de 50 euros de alquiler por persona, con habitación individual en pisos compartidos totalmente equipados (gastos de consumos de agua y luz aparte), además de comprometerse a realizar trabajos comunitarios con colectivos vulnerables de barrios desfavorecidos de Bilbao. Los resultados de la iniciativa han sido tan satisfactorios en sus dos primeros años que se ha duplicado las plazas a ofertar, pasando de las 14 plazas de alquileres baratos en el curso 2010/2011, a las 27 plazas del curso 2012/2013. Desde la puesta en marcha de esta iniciativa ya han sido 67 los estudiantes que han participado en el programa y según sus promotores con un alto índice de satisfacción para todas las partes. En total para el curso 2012/2013 se han destinado a este programa un total de 11 pisos municipales para esta modalidad de alquiler barato y solidario y se han asignado 27 inquilinos, menores de 35 años, que cursan formaciones de postgrados. La selección de estos jóvenes estudiantes se ha llevado a cabo mediante un cuestionario en el que se valoraba la experiencia de participación social y una entrevista personal. Las labores de voluntariado establecidas como contrapartida incluyen colaborar con asociaciones de los barrios seleccionados u otras asociaciones y programas sociosanitarios. Esto se traduce en participar y ayudar en talleres de ajedrez para niños y jóvenes; de baile para mujeres; de yoga; promoción de huertos urbanos; participación en los grupos scouts; colaboración con asociaciones que trabajan con personas con discapacidad, apoyo a programas de la sanidad pública vasca (Osakidetza); fomento del deporte; colaboración con medios de comunicación del barrio; y clases de apoyo de euskera para padres y madres. Desde el punto de vista formativo, el programa busca igualmente complementar la formación académica de los jóvenes con la responsabilidad comunitaria y social. Además, los 11 pisos para estos estudiantes se encuentran ubicados en los barrios donde desarrollan las labores de voluntariado (Otxarkoaga y Bilbao La Vieja), con lo que además se contribuye al rejuvenecimiento de la zona y la presencia de personas con formación universitaria.