El examen implicará tanto el diseño como el proceso productivoLa revisión que el Gobierno de EEUU realizará del modelo de avión 787 de Boeing tras los incidentes registrados los últimos días supondrá una "inspección a fondo", tanto del diseño de la aeronave como de los procesos de producción, según indicó ayer el secretario de Transporte, Ray LaHood. En una rueda de prensa junto al director de la Dirección de Aeronáutica Civil (FAA por su sigla en inglés), Michael Huerta, y el presidente de la división de aviones comerciales de Boeing, Ray Conner, LaHood indicó que se hará "todo lo necesario" para que los problemas en el Dreamline 787 no se vuelvan a producir. "La seguridad es nuestra prioridad, por lo que asumimos esta responsabilidad como la más seria", indicó el secretario de Transporte. Pese a las investigaciones anunciadas, tanto LaHood como el director de la FAA señalaron que mantienen "su confianza" en el 787, y el propio LaHood aseguró que él "no tendría ninguna reserva" para volar en un avión de este modelo. La intervención del Gobierno se produce después de que el lunes una batería de litio de un 787 de Japan Airlines que se encontraba parado en el aeropuerto de Boston se incendiara.