Conecta la subestación de Larrabee Road y le quedan por invertir 700 millonesIberdrola continúa su expansión en tierras americanas. Tras poner en marcha en junio de 2012 la primera subestación del Proyecto de Fiabilidad Eléctrica de Maine en la localidad de Monmouth para la interconexión eléctrica con Canada, ahora ha puesto en marcha la subestación de Larrabee Road, que ha supuesto una inversión de 57 millones de dólares (43 millones de euros), gracias a que Central Maine Power (CMP) ha conectado a la red eléctrica esta subestación. Esta operación alcanza el 50 por ciento de la inversión prevista en el proyecto ya citado que la compañía española desarrollará en EEUU y llegan de esta forma a los 1.400 millones de dólares (1.072 millones de euros). Larrebee Road (345 kV de potencia), entra dentro del proyecto que tiene en mente Iberdrola para suelo americano, en la que tratará de mejorar y modernizar su red eléctrica de transmisión y dará servicio a las comunidades de Androscoggin, Franklin, Kennebec y Oxford, así como a los condados de Sagadahoc, con el objetivo de garantizar la seguridad y calidad a largo plazo del suministro eléctrico. El proyecto supone un gran avance tanto para Iberdrola como para la central en Maine, ya que Sara Burns, presidenta de CMP, ha señalado que "esta subestación supone una mejora importante para nuestra infraestructura eléctrica del oeste de Maine". Además, ha destacado que es una de las primeras piezas que permitirán contar con una red más fuerte y más inteligente para el futuro. Además, la central es una de las primeras plantas inteligentes que construyen en EEUU, para lo que ha utilizado la plataforma digital IEC-61850, que permite la automatización y el mantenimiento predictivo de las redes. Esta iniciativa contempla la construcción de cinco nuevas subestaciones de 345.000 voltios y un nuevo tendido de alta tensión de más de 700 kilómetros. Todas estas instalaciones permitirán a la compañía reforzar sus infraestructuras de transmisión eléctrica así como integrar nueva capacidad de generación para atender el crecimiento de la demanda en la región noreste de Estados Unidos, conocida como Nueva Inglaterra. Se trata del mayor proyecto de construcción de infraestructuras que se ha llevado a cabo nunca en Maine. El proyecto ha creado 2.700 empleos directos y se estima que generará unos 900 nuevos empleos indirectos entre las empresas proveedoras y de servicios. Comenzado en septiembre de 2010, Iberdrola espera terminar la fase de construcción a mediados de 2015.