Firman un documento similar al del pre acuerdo alcanzando con tierraParece que el recién estrenado año 2013 ha traído una buena dosis de coherencia a Iberia. La dirección de la aerolínea y el colectivo de pilotos agrupado en el sindicato Sepla han firmado un principio de acuerdo que debe sentar las bases para pactar durante este mes las condiciones definitivas del duro plan de ajuste que tiene que aplicar la compañía aérea. El documento, al que ha tenido acceso este periódico, es bastante parecido al que se firmó el pasado 17 de diciembre de 2012 con el resto de trabajadores de la compañía. Así, se amplía dos años (desde 2015 hasta 2017) el plazo para que la empresa consiga ser viable. Al mismo tiempo, Iberia se compromete a invertir en la renovación de flota de aviones que permita alcanzar los objetivos de este plan. Esta promesa comenzará a cumplirse el próximo 15 de febrero, día en el que la compañía aérea recibirá el primer A330-300 de los ocho que tiene comprometidos con Airbus, el fabricante europeo de aviones. No obstante, el grupo aéreo tiene todavía en el cajón la gran renovación de aparatos de largo radio. Vuelos domésticos rentables El acuerdo marco también incluye un compromiso por ambas partes para que los vuelos domésticos (que incluyen las operaciones en España y Europa) sean rentables y eficientes. Para ello, "Iberia hará sus mejores esfuerzos para recuperar aquella producción que realizan otros operadores con código Iberia". En el caso de que no resultara rentable recuperar ese negocio se seguiría realizando por terceros adscritos al grupo: Air Nostrum, Iberia Express y Vueling. Este es sin ninguna duda uno de los puntos de fricción entre dirección y sindicatos, ya que los actuales costes laborales de los pilotos hacen inviable que sigan asumiendo los vuelos de corto y medio radio. A partir de ahí, hay dos opciones: que Iberia Express asuma la mayor parte de este negocio o que los comandantes realicen una notable bajada de sueldo que podría suponer la reducción de sus ingresos en un 50 por ciento. En el último laudo emitido por Jaime Montalvo impondrá rebajas del 40 por ciento del sueldo para los nuevos pilotos. El problema es que dado el plan de viabilidad que afronta la aerolínea y, que supone la reducción de empleados, no es de esperar que contrate nuevos profesionales, por lo que si se emplean los comandantes ya existentes en Iberia para realizar estos vuelos, estas cuentas no saldrán. El acuerdo también mantendrá los negocios de mantenimiento y handling hasta 2017. No se podrán segregar ni convertir en filiales ninguna de estas actividades sin el acuerdo de todas las partes e Iberia se presentará a los concursos de renovación de licencias de handling a terceros siempre que las ofertas sean competitivas y supongan una rentabilidad asegurada para la compañía aérea. La actual queja de la dirección a este respecto es que sólo se gana dinero en el negocio de servicios aeroportuarios en tierra de Barajas y El Prat. Acogerse al ERE de 2001 Dentro de los 4.500 empleados afectados por los recortes de la aerolínea, los aproximadamente 540 pilotos que tienen que abandonar Iberia, de una plantilla total de 1.440, se podrán acoger a unas condiciones más suaves a las existentes en la actualidad. Para ello, Iberia también ha ofrecido a los pilotos (ya lo hizo con el colectivo de tierra y las azafatas) la posibilidad de acogerse al ERE que todavía está vigente en la compañía y que fue firmado en 2001. Desde esa fecha, unos 5.000 empleados de la empresa han elegido esta modalidad y los cálculos de la compañía dirigida por Rafael Sánchez-Lozano es que con el actual plan de viabilidad otras 3.000 personas se sumen a este ventajoso expediente de regulación.