barcelona. El actual proceso de internacionalización en el que está inmerso el fabricante de componentes para el automóvil Ficosa pasa por afianzarse en los denominados "mercados emergentes" fuera de España. Eso significa, según su consejero delegado Xavier Pujol, que para ser competitivos las fábricas de que dispone la compañía en el este de Europa (Polonia, Eslovenia y Rumanía) y en Turquía aumentarán su producción de aquí a 2009. Y, por consiguiente, se "replantearán las funciones productivas" de las plantas en Francia y Alemania para nutrir a los fabricantes de automóviles desde las fábricas que dispone Ficosa en el Este de Europa con costes más baratos. "La industria automovilística está produciendo más vehículos en la Europa central y esto modificará nuestros pedidos", dijo ayer Pujol en un acto de la Asociación por el Progreso de la Dirección (APD). Otras fuentes aseguran que las plantas de Francia y Alemania, con costes más elevados que España, podrían cerrarse en los próximos años. Ficosa también reforzará la producción en México, India y China. La compañía quiere comprar el 45% fuera de España. En 2001 este porcentaje era del 19%. Una de las consecuencias de este proceso puede ser la deslocalización. De hecho, Ficosa ya ha anunciado el cierre de su planta en Sant Guim de Freixenet, que da trabajo a más de 180 personas por las pérdidas de 16 millones de euros acumuladas desde 2001.