El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, argumenta que la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) no generará un déficit público inmediato porque se ha optado por que sea privada, pero que el saneamiento global del sector sí elevará esta rúbrica. "Del déficit público no nos escapamos", manifestó ayer en una conferencia en los Desayunos de KPMG en Barcelona. El banquero explicó que este incremento se producirá en el momento en que el Frob venda las entidades bajo su control, ya que el Estado no recuperará todo el dinero desembolsado para la recapitalización. Con esta advertencia quiso quitar hierro a la obsesión del Gobierno sobre la creación del banco malo y que éste tenga una participación privada mayoritaria en el capital, para que no compute como déficit. El Sabadell defiende la constitución de un banco malo público. Oliu indicó que su grupo entrará en el capital de la Sareb dependiendo de la rentabilidad que ofrezca esta sociedad.