La 'moneda única' llegó a intercambiarse a 1,2652 dólares La de la divisa común era la otra reacción más esperada durante la jornada de ayer. El BCE cumplió el guión filtrado en la sesión anterior por la agencia Bloomberg, y al decir lo que los inversores querían escuchar éstos interpretaron que las maniobras de Mario Draghi para evitar la caída de Italia y España y garantizar la irreversibilidad del euro benefician, sin duda, a la moneda única. Y ésta reaccionó con alzas, traspasando la cota psicológica de los 1,26 dólares. No fueron abultados los avances vistos, pero sí simbólicas las cotas que alcanzó el euro en su cruce más importante, contra el billete verde. Bastó un avance del 0,4 por ciento para que la moneda común llegase a intercambiarse a 1,2652 dólares, su cambio más alto desde el pasado 2 de julio. La de ayer fue la segunda sesión consecutiva al alza del euro, en la que acumula una discreta subida del 0,6 por ciento. En el año, la moneda comunitaria se deprecia un 2,38 por ciento contra la divisa estadounidense, aunque de activar la Reserva Federal el QE3 (tercera ronda de estímulo cuantitativo), podría recuperar parte del terreno perdido al volver a inundarse el mundo de dólares. Los expertos de Ecotrader sitúan las resistencias clave del euro en 1,275 dólares. Rozando los 100 yenes Más notorio fue el comportamiento de la moneda en su cruce contra una de las consideradas divisas refugio, el yen, contra la que se apreció un 1 por ciento. Así, el cambio alcanzó niveles relativos al 5 julio al intercambiarse cada euro por 99,81 yenes. También batió máximos contra el franco suizo, la otra moneda refugio, al alcanzar los 1,20678 francos por primera vez desde el 24 de mayo. Pero hay que recordar que el franco está intervenido por el Banco Central de Suiza para evitar una excesiva apreciación contra el euro, por lo que la variación es de centésimas.