Cerrará su planta portuguesa en el mes de diciembre y despedirá a 1.100 personasMADRID. El Opel Combo recorrerá, a partir del próximo invierno, más de 930 kilómetros, los que hay de Lisboa a Zaragoza. Tras una larga y para muchos sufrida espera, General Motors (GM) ha confirmado que dejará de producir este automóvil en su planta de Azambuja, municipio de la capital portugesa, y que la traslada a la localidad aragonesa de Figueruelas.Una decisión que ha traído más lágrimas que sonrisas, ya que GM posee sus propias instalaciones en Zaragoza - lo que le permite reducir costes-, pero deja en la calle a los 1.100 empleados que trabajan en la fábrica lusa. GM asegura que el traslado se debe a los "altos" costes logísticos en Portugal y las ventajas de costes que se obtienen "a través de las sinergias que ofrece una producción en España". Además, según estimó ayer el consejero de Economía, Hacienda y Empleo del Gobierno de Aragón, Alberto Larraz, la nueva producción creará unos 800 empleos entre directos e indirectos. La decisión de la multinacional fue comunicada oficialmente al Ejecutivo autonómico en el mediodía de hoy, explicó el consejero en una breve comparecencia ante los medios de comunicación, quien mostró satisfecho por el anuncio pero a la vez "preocupado" por el futuro de los trabajadores portugueses afectados por el cierre de la factoría de AzambujEl gigante de la automoción asegura que si se mantuviese en Azambuja, la empresa tendría pérdidas de 35 millones anuales. "No podemos continuar perdiendo tanto dinero como en los últimos años; queremos sobrevivir", afirmó el vicepresidente del área industrial de GM Europa, Eric Stevens, según recoge Ep. En total, la fábrica que GM tiene montada en Zaragoza producirá al año unos 75.000 de estos vehículos comerciales ligeros al año. Irse sale caroNo obstante, el traslado de Portugal a Madrid no le saldrá gratis a GM. Al gigante de la automoción le costará dinero, ya que, como acordó con el Estado portugués, si abandonaba sus compromisos antes del plazo fijado tendría que pagar una indemnización de 30 millones. Sin embargo, la filial europea de la compañía estadounidense asegura que el importe será inferior.