Quería evitar juicios al creer que la coreana copiaba sus móvilesEjecutivos de Apple confirmaron ayer que la compañía intentó evitar el pulso legal con Samsung ofreciendo la posibilidad de que pagase 30 dólares (24,4 euros) por cada smartphone que vendiese y 40 dólares (32,5 euros) por cada tablet. Esta oferta se remonta a octubre de 2010. Las negociaciones no prosperaron y fueron el origen de la batalla judicial que ambas compañías mantienen en la actualidad. Apple y Samsung se enfrentan en varios países con acusaciones cruzadas sobre supuestas vulneraciones de patentes y delitos de plagio. Las dos compañías mantienen posturas contrapuestas y se han lanzado graves acusaciones mutuamente. En California se está desarrollando uno de juicios más importantes, que podría decidir el futuro del resto de litigios. En ese proceso se están conociendo detalles sobre las relaciones de ambas compañías y ejecutivos de ambas firmas están comentando datos sobre el origen del conflicto. La última novedad del caso que se ha conocido es que Apple, en un principio, estaba dispuesta a evitar una batalla legal con Samsung. Según All Things Digital, los de Cupertino no querían enemistarse con uno de sus proveedores principales, por lo que buscaron una forma de que Samsung ofreciese una compensación por utilizar sus diseños. La propuesta de Apple, realizada en octubre de 2010, consistía en que la surcoreana pagase 30 dólares por cada smartphone Galaxy que vendiese con el diseño del iPhone y 40 dólares por cada tablet. Para Apple era una cantidad justa por utilizar lo que consideraban como sus diseños. Además, Apple habría estado dispuesta a aplicar distintos descuentos a Samsung si la surcoreana accedía a compartir varias de sus patentes. El objetivo de Apple era conseguir lo que consideraban justo y evitar entrar en mayores problemas con Samsung, una de las compañías que fabricaba componentes para sus dispositivos.