La falta de extraordinarios, las provisiones y el deterioro del negocio en España lastran los resultadosEl mercado internacional tira... pero no es suficiente para salir de las crisis. En los últimos años las empresas del Ibex 35 se han visto obligadas a vender fuera cada vez más -el 58 por ciento de sus ingresos vienen del exterior- para poder mantener los beneficios dentro, pero el deterioro del negocio en España ha pesado más en las cuentas de las multinacionales, que en el primer semestre del año han sufrido una de sus mayores caídas desde el inicio de la crisis. A falta de que presenten seis compañías -Día, Amadeus, IAG, Bankia, Inditex y ACS- las cotizadas del Ibex han logrado 13.252 millones de euros, un 34,9 por ciento menos que en el mismo periodo de 2011. Así, de las 29 empresas que han presentado sus resultados, el 72,4 por ciento ha ganado menos. "Lo único bueno de 2011 es que es mejor que 2012". Juan Roig, consejero delegado de Mercadona, despidió el año pasado con estas palabras, que el imparable aumento del paro, la caída del consumo y la recesión, acompañadas del alza del IVA, han hecho realidad. Aunque el negocio internacional todavía sostiene las ventas de las empresas del Ibex 35 -han crecido un 5,4 por ciento hasta junio- no ha logrado compensar la caída de las ventas en casa, la falta de plusvalías y el aumento de las provisiones tanto bancarias como empresariales. Aguanta las ventas Por ejemplo, FCC ha compensado la fuerte caída de la actividad de infraestructuras en España con el buen comportamiento de la actividad internacional, cuyos ingresos han crecido un 12,6 por ciento hasta los 2.985 millones, lo que representa el 56 por ciento del total. Aún así, los beneficios de la multinacional que preside Esther Koplowitz han caído un 47 por ciento, hasta los 53 millones de euros por la entrada en números rojos, de su negocio de cementos, que se ha visto fuertemente afectado por la crisis inmobiliaria en España y el cierre del grifo de la inversión en infraestructuras por parte de Fomento. Otro ejemplo es Acciona cuyo resultado neto ha caído un 67 por ciento pese al alza del 8 por ciento de la facturación. Detrás de este deterioro está la falta de extraordinarios. En el primer semestre de 2011, Acciona obtuvo una serie de plusvalías por las ventas de dos concesiones en Chile y un aparcamiento en Brasil. Según explica la empresas en sus cuentas, sin estos apunto contables el ebit (beneficio operativo neto) hubiera mejorado un 13 por ciento. La banca, Telefónica y la entrada en pérdidas de Sacyr han sido el principal lastre para los beneficios de las empresas del selectivo español. Los reales decretos aprobados por el Gobierno de Mariano Rajoy en materia de saneamiento y provisiones han deteriorados los resultados de las entidades financieras, que aportan el 27 por ciento de los beneficios del índice selectivo. Así, la banca ha provisionado con cargo al resultado neto hasta 4.103 millones de euros, lo que implica que los beneficios se han hundido un 49,82 por ciento con respecto al primer semestre de 2011. Por ejemplo, el saneamiento del ladrillo en BBVA ha conducido a su filial española a pérdidas. Según las cuentas presentadas por la entidades, el negocio en España ha cerrado con unos números rojos de 221 millones de euros mientras el grupo entero ganaba un 35 por ciento. CaixaBank y el Santander también han sacrificado gran parte de sus resultados para cumplir de una vez con las exigencias del Estado. Telefónica, una de las compañías que más gana dentro del selectivo, ha visto cómo sus beneficios se desplomaban un 34,4 por ciento, hasta los 2.075 millones de euros. El negocio en España ha ido mucho peor de los esperado y se ha comido el aumento del 7 por ciento de los ingresos de América Latina. El descenso de la facturación ha afectado directamente al beneficio bruto (ebitda) que ha caído un 7,7 por ciento lo que hace imposible cumplir los compromisos de ratios de deuda y le han obligado a sacar a la venta varios activos como Atento o parte de su participación en China. Sacyr es otra de las grandes piedras en el camino del Ibex. La constructora ha cerrado el primer semestre del año en números rojos de 735 millones de euros. La multinacional presidida por Manuel Manrique se ha visto obligada a provisionar 780 millones de euros netos por la caída del valor de su participación en Repsol. A las energéticas les ha ido mal el negocio en España por el menor consumo. Repsol por su parte se ha visto afectada por la nacionalización de YPF. Ha contabilizado una pérdida neta de 38 millones como consecuencia de la expropiación.