El sector eleva su rentabilidad, desafía a la crisis y acelera sus planes de aperturamadrid. Las empresas propietarias de los grandes centros comerciales no temen ni a la crisis ni al parón del consumo. Convencidas de que la situación mejorará a corto plazo han decidido acelerar sus planes de expansión y abrir en los próximos tres años 75 grandes establecimientos en toda España. Actualmente, el país cuenta con 487 centros comerciales que suman una superficie de 11,9 millones de metros cuadrados. Aunque el ritmo de aperturas varía de año en año en función de las licencias y los proyectos que hay en marcha, hay un dato que resulta especialmente significativo. Y es que este año se abrirá una superficie de más de 800.000 metros cuadrados, es decir, el equivalente a 80 campos de fútbol. 2003: año récord El año que se han abierto más centros comerciales de toda la historia fue en 2003, cuando se inauguraron 36 centros y más de un millón de metros cuadrados. Pero, según explican en el sector, se trató de algo circunstancial debido a que ese año se abrieron no sólo un gran número de centros comerciales que habían estado paralizados por razones administrativas hasta entonces, sino que además los que se inauguraron eran de grandes dimensiones. La gran locomotora del sector es sin duda Madrid, que cuenta ya con 92 grandes centros comerciales, el 18,9 por ciento del total de los que existen en España. Gracias a la política de liberalización emprendida por Esperanza Aguirre, esta comunidad autónoma acapara ya el 22,5 por ciento de toda la superficie comercial que hay en España. Y es que tiene ya tantos centros comerciales como Cataluña y Valencia juntas. Esto es debido, además, a las importantes restricciones que la Generalitat catalana ha impuesto al desarrollo del gran comercio. De hecho, según los últimos datos de la Asociación Española de Centros Comerciales (AECC), mientras que en Madrid hay 441 metros cuadrados de superficie bruta alquilable por cada mil habitantes, en Cataluña apenas llega a 157 metros. Crece la rentabilidad Según los expertos del mercado, con este tipo de políticas no sólo se está frenando la inversión y la creación de empleo, sino que se ahoga una parte del mercado inmobiliario que mantiene importantes tasas de rentabilidad, frente a lo que ocurre ahora mismo, por ejemplo, con el de la vivienda o las oficinas.