La elevada deuda y las pérdidas previstas, detrás de la decisiónLa agobiante situación financiera que vive el grupo siderúrgico ArcelorMittal le ha llevado a dejar en suspenso una inversión de 147 millones de euros para la construcción de las nuevas baterías de coque de Gijón (Asturias). La multinacional ha hecho este anuncio apenas un día después de comunicar a los trabajadores que la situación de la empresa "es muy difícil". La siderúrgica europea ha argumentado su decisión "a la vista de la continuidad de la excepcional coyuntura económica actual", y ha asegurado que la alimentación de los dos hornos altos de Gijón queda garantizada con la capacidad actual. Tras los resultados económicos del primer trimestre de ArcelorMittal, especialmente negativos para las plantas europeas que registraron pérdidas de 284 millones de euros, el gigante del acero prevé un segundo semestre "aún peor". La multinacional del acero, que ha vendido su negocio de distribución del acero en EEUU por 478 millones de dólares para conseguir liquidez con la que hacer frente a los pagos y a su elevada deuda, ha comunicado esta decisión a los representantes de los trabajadores, dentro de su compromiso a favor del diálogo social "basado en la transparencia, máxime en estos momentos, con una coyuntura de mercado muy difícil". La situación en Asturias es muy complicada por la caída del precio del acero y el aumento de las tasas portuarias de El Musel que, según planteó la compañía, podrían compensarse con una rebaja del 4 por ciento de la masa salarial de los empleados de las dos factorías asturianas, explican los sindicatos. El expresidente regional Vicente Álvarez Areces, a su vez senador, destacó que Arcelor-Mittal "no puede tomar medidas unilaterales que afecten al futuro y al empleo cuando saben que en esta comunidad siempre se les ha apoyado". "Espero de Arcelor una posición razonable y de apoyo al mantenimiento del empleo", remarcó