La filial de Abengoa pagó a su matriz 150 millones en dividendos en 2011Befesa, la empresa especializada en gestión y reciclaje de residuos industriales controlada en su totalidad por Abengoa tras su exclusión de Bolsa en 2011, goza de buena salud en medio de la crisis y sigue creciendo dentro y fuera de España. Precisamente en el exterior, de donde proceden el 63 por ciento de los ingresos totales de 2011 (661 millones, un 14 por ciento más), es donde la firma está desarrollando un plan de crecimiento para implantarse en Corea del Sur, Tailandia, China y Emiratos Árabes Unidos. Ello se suma a los 22 mercados donde ya opera, en diez de ellos con instalaciones industriales propias. El objetivo último, según explica la compañía a elEconomista, es duplicar el volumen de residuos tratados y el volumen de ingresos en unos cinco años, hasta 1.200 millones. Estos planes en el exterior, desvelados hace unos días por el presidente de la compañía, Javier Molina, durante un acto en Huelva permiten a Befesa recuperar y aumentar su despliegue por el mundo tras dejar de tener presencia en India y China el pasado año como consecuencia de la venta de su división de Agua (desalación) a la propia Abengoa por 106 millones. La firma tenía dos concesiones para sendas desaladoras en esos países. Ahora, Befesa ambiciona recuperar su posición en el gigante asiático, donde las necesidades de gestión de residuos de su creciente sector industrial son enormes. Vectores de desarrollo Estos nuevos destinos complementan la presencia de Befesa tanto en Latinoamérica fruto de su propio crecimiento orgánico a la par que el de su matriz, como en Europa, donde dio un salto de gigante tras adquirir en 2006 la alemana BUS. El despliegue internacional está centrado en las actividades de reciclaje de residuos de acero en sudeste asiático y Europa, donde según el informe anual 2011 de la compañía ya se han identificado oportunidades. Como en Turquía, donde la filial Befesa Zinc tiene previsto abrir en 2014 su segunda planta -tras adquirir el 51 por ciento de una primera instalación el pasado año- y ya ha adquirido terreno para construir una tercera. En paralelo, esta filial ha paralizado la construcción de una planta en el sur de España por la incertidumbre económica, al tiempo que la propia Befesa ha clausurado la actividad de aluminio en Valladolid para concentrarla en Bilbao. Junto a ello, Befesa quiere entrar en EEUU y Oriente Medio en el segmento de reciclaje de escorias salinas, "donde ya existe algún proyecto en proceso de desarrollo", avanza el informe. En tercer lugar, se pretende crecer orgánicamente en Europa en la actividad de residuos de aluminio. Y, por último, la compañía estudia compras en cualquiera de sus áreas de negocio. Junto a estas perspectivas, sobresalen entre las cifras del informe anual los 150 millones, distribuidos en dos tramos de 60 y 90 millones, que el consejo de Befesa aprobó en abril y diciembre del pasado año. De esta manera el efecto neto de las dos grandes operaciones intragrupo entre Abengoa y Befesa es positivo para la matriz en unos 44 millones de euros, resultado de restar a lo cobrado por dividendo lo pagado por la división de agua.