Sevilla. Apenas lleva tres días en su nuevo cargo, pero Antonio Pulido lo tiene muy claro. Después del último y demoledor informe del Banco de España, el recién nombrado presidente de la caja de ahorros sevillana El Monte se ha propuesto firmemente disminuir el volumen económico que genera el sector inmobiliario en la entidad hispalense. De hecho, el alto riesgo acumulado en los últimos años llevó la semana pasada a José María Bueno Lidón a presentar su dimisión, tras las críticas recibidas del organismo regulador y de la Junta de Andalucía. "Tenemos que ser conscientes del peligro que entraña invertir en el sector inmobiliario por todos los factores que le rodea. Poner nuestro dinero en el suelo no es malo, siempre y cuando se haga en su justa medida y con carácter social. Que nadie piense que vamos a dejar el sector inmobiliario. Pero a partir de ahora seguiremos en él siguiendo las directrices del Banco de España y la Consejería de Economía", admitió Pulido ayer durante un desayuno informativo con periodistas.En este sentido, la directora general de la caja, María Luisa Lombardero, aseguró que "no está previsto realizar más desinversiones en el sector". Pero no se descartan para diversificar la inversión en otros sectores, como el de la alimentación. Lo que está claro es que la principal premisa a partir de ahora para la entidad será conseguir que la vivienda no sea el centro de atención en los números de El Monte. "Hay que bajar algo nuestro porcentaje de participación en el suelo", confesó la propia Lombardero.No es extraño este drástico giro en la línea de actuación de la caja andaluza. El 'rapapolvo' del informe del Banco de España le dejaba las cosas muy claras, después de comprobar el frenético ritmo de crecimiento hipotecario, así como el aumento de los créditos a promotores inmobiliarios. La investigación sobre supuestas irregularidades en algunas de las empresas participadas de El Monte fue la gota que colmó el vaso de un escrito muy contundente contra la entidad crediticia. El riesgo que conlleva la inversión inmobiliaria se reduciría en caso de producirse la fusión de las cajas sevillanas. Pero hablar de la unión de El Monte y la Caja San Fernando es el cuento de nunca acabar, por más que José Antonio Griñán, consejero de Economía y Hacienda, intente conseguir que dicho proceso concluya antes de las elecciones municipales de 2007.Pulido se fijó como meta ver la luz al final del túnel de la unión. "El objetivo de esta presidencia será impulsar, facilitar y eliminar las trabas que existan en el proceso de fusión. Si conseguimos hacerlo antes de septiembre de 2007, habremos hecho un gran favor a la sociedad andaluza, dotándola de un instrumento fundamental para hacerla más competitiva", se propuso.