La semana pasada tuvo lugar un simposio de "Educación a lo largo de la vida: un desafío social y económico" organizado por las Fundaciones Ramón Areces y Sociedad y Educación, en el que participaron expertos en educación, analistas de entidades internacionales como OCDE, Banco Mundial, UNESCO y UE, profesores investigadores, técnicos del estado y representantes del ámbito empresarial y sindical. Las conclusiones del I Simposio Internacional se basan en reclamar una mayor implicación de los gobiernos y, sobre todo, de las empresas, para incentivar el desarrollo de una cultura de formación permanente. Además, indicaron que el elemento clave para hacer frente al desempleo juvenil y el aumento de la productividad son programas educativos de larga duración. La ponencia de apertura corrió a cargo del presidente del Consejo Escolar del Estado, Francisco López Rupérez. El primer bloque de la jornada fue el liderado por los representantes y analistas expertos de la OCDE, Banco Mundial y UNESCO, que expusieron los programas sobre educación impulsados por estas entidades. La experiencia de la política europea corrió a cargo de Fiorella Perotto, subdirectora de la Unidad Educación y Formación en Europa 2020, de la Comisión de Educación y Cultura de la UE. Los profesores Jorge Calero de la Universidad de Barcelona (UB), Javier Valle, de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Florentino Felgueroso de la Universidad de Oviedo (UO), y José Antonio Marina, catedrático de Educación Secundaria, filósofo y escritor, fueron los encargados de ofrecer un enfoque en perspectiva de la situación española. En el último bloque (segundo día del simposio) se contó con las aportaciones de las buenas prácticas llevadas a cabo por países como Holanda o Dinamarca, en la que destacó la conferencia de Alberto Terol, responsable de la Comisión de Educación del Círculo de Empresarios.