El nuevo paraje podrá tener usos turísticos, urbanísticos y producir energía eléctricaCon un perímetro de casi 18 kilómetros, 205 metros de profundidad y 865 hectáreas, el pasado 18 de abril a las 14:00 horas el lago de As Pontes reboso su capacidad y se convirtió en el mayor lago de todo el territorio Español. Hasta hace cuatro años este espacio estaba ocupado por una mina a cielo abierto que realizó durante 30 años trabajos de extracción para suministrar el carbón a la mayor central térmica de España, propiedad de Endesa, con una potencia instalada de 1.400 megavatios. Ahora esta superficie y la escombrera de la mina se han transformado en un paraje natural con un monte de 1.200 hectáreas que alberga ya una variedad de 180 especies animales y más de 220 plantas diferentes, además de un lago con islas y playa que se convertirán en un claro reclamo para turistas. Grandes expectativas Este proyecto es, según Endesa, la mayor restauración ambiental realizada en España en la que la eléctrica ha invertido 250 millones de euros. "Se trata de una bañera de agua llena de expectativas" asegura el alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, que explica que elaborarán junto a Endesa un Plan Territorial Integral tutelado por la Xunta de Galicia para darle el mejor uso a este proyecto dentro de sus distintas posibilidades. Con este plan intentaremos "garantizar la máxima seguridad jurídica y la solvencia técnica, para determinar cómo se puede aprovechar el lago", aseguró el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante su visita al lago, en la que también estuvo presente Borja Prado, presidente de Endesa. Ambos explicaron que en principio se buscarán usos energéticos. Por su parte, Endesa tiene un anteproyecto para crear una central de bombeo, que produciría entre 300 y 600 megavatios, pero también está en el punto de mira un proyecto de biomasa. Según el alcalde de As Pontes, son varias las empresas que se están interesando ya por este proyecto. Las propuestas son muchas y variadas, desde instalar bungalós en la arena de la playa, crear una pista de aterrizaje para probar hidroaviones, hasta la creación de una gran área comercial. Lo que está claro es que el nuevo paraje tiene grandes expectativas urbanísticas, aseguró González, que también habló del potencial turístico del lago, que podrá ofrecer deportes náuticos, pesca, senderismo o turismo de playa. Pero de momento, y hasta que se lleve a cabo la reordenación del territorio, este lago artificial, que es uno de los más grandes de Europa y que pasará a ser de dominio público a través de la gestión de Aguas de Galicia, probablemente estará abierto este verano para los posibles bañistas.