Las matriculaciones retornan a cifras de principio de los años 90 y la patronal avisa del desmantelamiento del sectorLas estadísticas no fallan. El sector del automóvil sigue no ya con el freno puesto, sino con la marcha atrás, y todo a punta a que si la situación no mejora, "un tercio de los concesionarios tendrá que desaparecer", explicó preocupado el presidente de la Asociación Nacional de Importadores de Automóviles (Aniacam), Germán López Madrid. Y motivos para la preocupación, hay. Así, las matriculaciones de automóviles alcanzaron 56.250 unidades durante el pasado mes de abril, lo que supone una caída del 21,7 por ciento respecto a las 71.805 unidades comercializadas en el mismo mes de 2011. Según datos de las asociaciones de fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam), se ha vuelto a niveles de principios de los años 90. "El mercado no da síntomas de recuperación, todo lo contrario", aseguró en un comunicado la patronal de los fabricantes de coches. En los cuatro primeros meses del año, las ventas de turismos y todoterrenos se situaron en 260.369 unidades, lo que representa una reducción del 7 por ciento en comparación con las 279.956 unidades contabilizadas en el mismo período del año anterior. Incertidumbre El segmento más afectado ha sido la venta a particulares, poco animados a cambiar de coche pese a las atractivas ofertas. Los datos del paro, la falta de confianza en las medidas del Gobierno y una escalada en los precios del carburante han tenido consecuencias irremediables. Las compras de particulares bajaron en abril el 16,6 por ciento, con un total de 24.338 unidades matriculadas. De esta manera, según la patronal, son ya 22 meses de descensos consecutivos. Hasta abril se matricularon por parte del canal de particulares un total de 111.979 unidades, lo que representa un descenso del 9 por ciento. Por su parte, el canal de empresa acumuló una caída del 7,2 por ciento, con 81.899 matriculaciones. Los alquiladores o rent a car sufrieron el mayor desplome con pérdidas del 48,1 por ciento, tras el pico del 55 por ciento por la Semana Santa.