Anfalum asegura que modernizar el alumbrado público y estudiar los puntos iluminados permitiría este recorteLos diferentes programas de eficiencia energética se presentan actualmente como una de las soluciones más claras a la hora de ahorrar. Así lo corrobora la Asociación Nacional de Fabricantes de Iluminación (Anfalum), que a través de un estudio demuestra que mediante el uso de modelos de iluminación inteligente la Administración Pública podría ahorrar hasta un 80 por ciento en el consumo energético. Según la asociación, en España, alrededor del 20 por ciento de los puntos de luz están equipados con lámparas de vapor mercurio, una tecnología que data de 1940. El cambio de estas bombillas por otras más eficientes, de menor consumo y mayor rendimiento se traduciría en un importante ahorro de energía y, si además se cambia el punto de luz al completo, se podrían alcanzar cifras de hasta el 60 por ciento. Inversión amortizada Además, una vez optimizado el alumbrado pueden conseguirse ahorros adicionales de hasta un 30 por ciento controlando de forma inteligente su uso a través de la combinación de la luz natural con la artificial, teniendo en cuenta la zonificación, el control horario o de presencia. Como ejemplo, el informe asegura que, un buen estudio lumínico en los centros de enseñanza españoles permitiría ahorros de alrededor de un 75 por ciento, con una amortización estimada de 3 ó 4 años y una reducción de los gastos anuales de más de 100 millones de euros. Sin embargo, Rafael Barón, presidente de Anfalum, advierte que la tasa media de reposición en iluminación pública es del 3 por ciento, un cambio cada 25 años, mientras que en el sector terciario, este plazo ronda los 15 años. Según el comunicado de Anfalum, más del 80 por ciento del stock actual de edificios en Europa estará vigente en 2050. Teniendo en cuenta que el parque español es más actual que los de la UE, la renovación en nuestro país será inferior, por lo que dentro de 40 años cerca del 90 por ciento de la iluminación de los edificios en España seguirá siendo la misma que la actual. Esto demuestra que el potencial de ahorro es elevado, sobre todo teniendo en cuenta que en nuestro país han sido construidos sin criterios eficientes cerca de 20 millones de edificios.