El Ministerio recorta un 6,5% su inversión en 2012, hasta 11.928 millones de eurosY en medio de tanta cifra, la ministra de Fomento, Ana Pastor, quiso ayer poner el lado humano al tijeretazo que ha recibido su Cartera, una de las más afectadas por el ajuste del Gobierno y que verá reducida su partida en un 34,6 por ciento. Y lo hizo sentándose con los medios de comunicación y una carpeta llena de documentos y datos calculados al milímetro y que ponían de relieve la "difícil situación" del Gobierno para cuadrar las cuentas. "Hay cosas que no hemos tenido más remedio que hacer gracias a la herencia recibida". Una herencia que, según confirmó Pastor, hace que Fomento cuente con un presupuesto inversor de 11.928 millones de euros en 2012, importe que supone una reducción del 6,5 por ciento respecto al ejecutado en 2011. Esta inversión, según la ministra, supone el 59 por ciento del presupuesto total del Departamento, 20.104 millones de euros, un 8,62 por ciento menos que en 2011. Son presupuestos "austeros y realistas, pero permitirán mantener al Ministerio como punta de lanza de la recuperación económica". Y que busca "hacer justicia". Y ello pasa, sin duda, por pagar la deuda a miles y miles de ciudadanos que después de diez largos años todavía no han sido todavía indemnizados por las expropiaciones de terrenos realizadas para construcción de carreteras, algunas de las cuales incluso ya están en servicio. "Ha llegado el momento de pagar", sentenció la ministra, que aseguró que Fomento abonará en 2012 el importe de 600 millones. La deuda total suma 715,70 millones. El pago de esta deuda se "comerá" el 19 por ciento del presupuesto de 3.160 millones con que el Ministerio cuenta para carreteras en el ejercicio 2012. Precisamente las vías de peaje, algunas en riesgo de quiebra, fueron las otras beneficiarias del Gobierno. Autopistas en quiebra Fomento ha resuelto prorrogar hasta 2021 la posibilidad de que las concesionarias con problemas de insolvencia recurran a las cuentas de compensación para atajar la caída de los tráficos y anunció, asimismo, 280 millones de euros para otorgar préstamos participativos a la decena de autopistas que actualmente han amenazado con echar el cierre. Por otra parte, en cuanto al resto de partidas, los gastos operativos alcanzan los 8.176 millones de euros, con un recorte en gastos de personal del 9,8 por ciento y de los gastos corrientes del 7,3 por ciento. La mayor tarta se la come Ferrocarriles (50,7 por ciento), con 6.043 millones, seguido de Carreteras (el 26,5 por ciento) y Aeropuertos (8,6 por ciento). "Espero que ni un solo euro esté mal gastado o mal invertido", subrayó a modo de justificación por la "herencia recibida".