Si la aprueban en la asamblea de hoy todavía podría afectar a la Semana SantaPoco ha durado la tregua del Sepla. Tras anunciar hace apenas dos semanas la desconvocatoria de las 24 jornadas de huelga, el sindicato de pilotos ha cumplido sus amenazas y volverá a convocar paros una vez que se ha consumado la creación de Iberia Express tras el estreno de sus operaciones el domingo. Según una carta que la dirección de Iberia ha mandado a sus empleados, a la que ha tenido acceso elEconomista, se explica que el domingo el mediador del conflicto entre el Sepla y la dirección de la aerolínea, Manuel Pimentel, presentó la propuesta de acuerdo fruto de la información recogida a ambas partes. "Los representantes del sindicato rechazaron de plano dicha propuesta, sin que el mediador diera a la compañía la opción a pronunciarse sobre la misma, al entender que una vez una parte la había rechazado, se daba por inviable". No existe obligación Aunque no han trascendido los detalles de esta mediación, está claro que no incluía ninguna decisión que afectara a la creación de Iberia Express, algo que ha enfrentado a los pilotos con Pimentel. A diferencia de un árbitro, el veredicto del mediador no es de obligado cumplimiento por ambas partes. Ahora, los pilotos deberán decidir si van a la huelga o en la asamblea de hoy o en la que se celebre el jueves. Si el acuerdo lo alcanzaran hoy todavía les quedaría tiempo a anunciar alguna jornada de huelga que salpicara el regreso de los pasajeros en Semana Santa, ya que sólo se necesita avisarlo con diez días de antelación. Si la decisión se produjera el jueves, los paros no afectarían a estas fiestas. De confirmarse las nuevas jornadas de huelga, la compañía estima que cada día de paros supone unas pérdidas de más de 3 millones de euros, un importe que podría ser muy superior si las movilizaciones coinciden con fechas clave en el calendario turístico. De momento, Iberia se tiene que enfrentar ya a los costes que supondrán para la aerolínea la próxima huelga general que se celebrará el próximo 29 de marzo, que supondrá la cancelación de 222 vuelos, el 60 por ciento del total. Ayer, el Ministerio de Fomento reaccionaba ante el bloqueo de las negociaciones con un comunicado oficial en el que pedía a ambas partes "responsabilidad para retomar el diálogo y alcanzar un acuerdo". La cartera dirigida por Ana Pastor recuerda que Manuel Pimentel ha mantenido numerosas reuniones con ambas partes para tratar "de encontrar vías de acuerdo para la resolución del conflicto". Fomento explica que el documento que Pimentel ha remitido a ambas partes el pasado 22 de marzo era un borrador en el que se establecía un proceso de dos partes: en un primer bloque se hablaba de un pacto previo al inicio de operaciones de Iberia Express y en el segundo bloque la negociación relativa al VIII Convenio Colectivo. Tres días después, el 25 de marzo, se propuso a ambas partes la propuesta de acuerdo pero "Iberia y Sepla no alcanzaron un acuerdo sobre esta propuesta", recalca el Ministerio en el comunicado. Desde Iberia se sigue insistiendo en que en ningún momento han cambiado de postura, ya que sólo admitirán negociar sobre el Convenio Colectivo y no sobre la creación y las condiciones de explotación de negocio de la nueva Iberia Express.