La Fiscalía Anticorrupción lo está investigandoEl juzgado de lo Mercantil número 1 de Granada autorizó el pasado 29 de febrero la venta de la fábrica de Dhul en Granada a directivos de la compañía junto con varios inversores de carácter financiero e industrial, con una oferta de 21,86 millones de euros. La oferta se presentó a través de RJ Consultoría de Empresas (RJCE), que representa al grupo de directivos del Grupo Dhul Carlos Santandreu, Antonio Isla, Concepción Roldán, Enrique Martín y Rogelio Morilla, a los que se sumó además Rodolfo Pla de Blas, en representación, según se dijo, de un pool empresarial nacional dedicado a la publicidad y marketing. El problema es que, según denuncian antiguos directivos de Rumasa, detrás de ese pool está realmente la empresa Factor Gráfico, uno de cuyos socios es Alejandro Ruiz-Mateos, sobrino de José María Ruiz-Mateos. Esta previsto, según la oferta, que la nueva sociedad se denomine Dulces y Postres de Granada, la cual asumiría los activos y pasivos correspondientes a la unidad productiva. Los socios financieros e industriales aumirán el 88 por ciento del capital social total de la nueva sociedad, mientras que los empleados de Dhul se quedarían con el restante 12 por ciento. "Todo indica que Alejandro Ruiz-Mateos podría estar actuando de testaferro de la familia. Por eso no figura en ningún sitio el nombre de Factor Gráfico", aseguran las fuentes consultadas. Él lo niega tajantemente. "Yo no tengo nada que ver. Es cierto que la oferta la presenta una persona de Factor Gráfico, pero yo estoy fuera. No tengo ninguna relación con mis primos, que me deben más de 3 millones de euros", ha asegurado a elEconomista. Pero la Fiscalía Anticorrupción ya lo está investigando.