Standard & Poor's se une a Fitch para revisar las notas por la deuda soberanamadrid. Nueva rebaja de la calificación a las entidades españolas. Aunque a primera hora de la tarde era Fitch la que decidía dar el paso al poner en su punto de mira al Santander, BBVA, Bankia y Caixabank, apenas unas horas después era Standard & Poor's (S&P) la que corregía y aumentaba al elevar los recortes de calificación a un total de 15 entidades financieras. ¿la razón? La agencia explicaban que la rebaja masiva se producía después de que a finales de enero rebajara la nota de deuda soberana española en dos escalones hasta A. Con esta nueva rebaja de la calificación, el rating que Fitch concede al Santander baja en dos escalones a la entidad que preside Emilio Botín y lo deja en A, con perspectiva negativa. La firma explicó que "la rentabilidad y la calidad de los activos en España continuarán afectados por un entorno económico débil". Sin embargo, Fitch aclaró que la exposición del banco al riesgo inmobiliario español está "sustancialmente mitigada" ya que ha provisionado casi la mitad. Fitch también destaca la aportación de sus filiales internacionales latinoamericanas para amortiguar el impacto negativo de la situación económica en la matriz española. En el caso de BBVA, la nota baja en un tramo, también hasta A, con perspectiva negativa, por lo que los dos grandes bancos españoles podrían ver nuevas rebajas en los próximos meses. En el caso de la entidad que preside Francisco González, la firma también destacó el efecto positivo que tendrá sus filiales en México y Sudamérica para mitigar el impacto de los problemas inmobiliarios en España. También consideró que está entre las entidades que mejor posición tienen para cumplir con los requisitos de provisiones y calificó a su nivel de capitalización como "bueno". Por otro lado, Fitch degradó la nota de Caixabank en un nivel, hasta A- desde A y la colocó también en perspectiva negativa. En el caso de la entidad que preside Isidro Fainé apuntaron a su dependencia del negocio doméstico como un problema para reducir las presiones del débil entorno macroeconómico en España. Pese a estos riesgos, destacaron como punto fuerte de la entidad la recurrente generación de ingresos que tiene su amplia franquicia minorista en todo el país. En el caso de Bankia, la calificación para el banco que preside Rodrigo Rato baja hasta el BBB+, aunque en su caso, es la única en la que su perspectiva queda estable. La firma justificó su decisión en la dependencia del banco de los mercados mayoristas para financiarse y en que se enfrenta a grandes necesidades de refinanciación a medio plazo con dificultades para acceder a los mercados de capital. S&P, un paso más Por su parte, la agencia de calificación -además de las cuatro entidades a las que Fitch rebajó la nota- también recortó la calificación Bankinter, Sabadell, Ibercaja, Banca Cívica, Popular, BFA, Kutxa, BBK, Vital y Barclays Bank. S&P dio un paso más allá al revisar, además, la nota del sistema financiero español desde el grupo 4 al grupo 5 dentro de su escala del uno al diez que mide la fortaleza del sector financiero en función del riesgo país, Bicra por sus siglas en inglés (Banking Industry Country Risk Assessment).Además, revisó la perspectiva de una a negativa desde estable; retiró la vigilancia negativa a 13 bancos (permanecían ahí desde el 8 de diciembre), de las que 11 han quedado en perspectiva negativa y dos en estable. Asimismo, mantiene en vigilancia para posibles rebajas los ratings del Sabadell y Popular, a la espera de su integración con CAM y Pastor, respectivamente. En concreto, la agencia recortó desde AA- a A+ el rating del Santander y de A+ a A el de BBVA. En el caso de Caixabank redujo su nota un escalón, desde A a BBB+, y en el de La Caixa en dos, desde BBB+ a BBB-. Asimismo, también rebajó desde BBB+ a BBB a Bankinter y de Ibercaja; desde BBB a BBB- a Sabadell y Cívica; desde BBB+ a BBB- a Popular y Bankia, mientras que el de BFA pasa de BB+ a BB-; desde BBB+ a BBB a BBK y Kutxa a las que deja de calificar.