Presentará la semana que viene un plan de ajuste para reducir su presupuesto madrid. RTVE protagoniza una carrera contrarreloj para encontrar la manera de recortar 200 millones de euros de su presupuesto. El margen de maniobra es muy escaso ya que, por el momento, el ente público tiene adjudicado más del 80 por ciento de sus ingresos. Hasta la fecha, en el consejo de la Corporación sólo tienen una cosa clara: los directivos y el caché de las estrellas tienen un billete de salida asegurado en el plan de ajuste. Una partida que, como mucho y según los primeros cálculos, supondrá un ahorro de 11 millones de euros, apenas un 5,5 por ciento del ajuste total. Ocho millones saldrían de reducir el salario de los presentadores (cobran una media de 200.000 euros al año) y tres millones del ajuste de la plantilla de directivos (ganan hasta 130.000 euros al año). "Está claro, se va a meter la tijera al sueldo de las estrellas y al organigrama, pero este recorte es el chocolate del loro, el problema es de dónde quitamos para reducir 190 millones más", explican fuentes del consejo. La cadena pública lleva varias semanas estudiando vías para "apretarse el cinturón". Entre las diferentes propuestas se encuentra una reducción de entre el 10 por ciento y el 50 por ciento del organigrama, la reducción de los salarios de los directivos, cancelar contratos de directivos externos (19 por ciento de la plantilla total), la revisión de los grandes contratos (emisión de series como Águila Roja, Amar en Tiempos Revueltos o Cuéntame)... "Se están evaluando todas las posibilidades", explicaron fuentes del consejo. Un equipo de la cadena está inmerso en la preparación del plan de ajuste, que tendrá que ser evaluado por el consejo lo más urgente posible. "Creo que se presentará la semana que viene", aseguraron. Desde RTVE han reclamado al Gobierno que retrase a 2013 el ajuste de 200 millones de euros, ya que, según dicen, es imposible recortar más de 80 millones este año. Aunque la vicepresidenta se ha comprometido a "estudiarlo", desde el ente no tienen ningún tipo de esperanza. Si finalmente el Ejecutivo reduce hasta los 1.000 millones de euros el techo de gasto de la corporación en el presupuesto de 2012, que deberá aprobarse en marzo, RTVE se encontrará ante un grave problema de desequilibrio. Según las previsiones de expresidente del ente, Alberto Oliart, la cadena cerró 2011 con un déficit de 50 millones de euros, un montante que se podrá disparar ya que el presupuesto de este año está adjudicado en su mayoría. Uno de los gastos extraordinarios que hacen "inviable" ese ajuste son las Olimpiadas. La pública se ha gastado 70 millones en comprar los derechos de emisión de los Juegos Olímpicos que se celebran en 2012, un gasto que se realiza a plazos desde que termina la última competición, pero que computa en las cuentas de este año. RTVE intentó a finales de año revender parte de los derechos entre las televisiones privadas para amortizar costes, pero la puja quedó desierta. "Llevamos con el presupuesto congelado desde 2009 y hemos reducido la plantilla en un 49 por ciento. Va a ser muy doloroso llevar a cabo estos recortes. Ponen en juego la labor pública de la cadena", explican desde la corporación. Los consejeros aseguran que los recortes van a afectar a la plantilla, que en noviembre pactó una subida del 2 por ciento de salario base y del 1 por ciento de los complementos, y a la programación. RTVE advirtió a Sáenz de Santamaría que un recorte de esas características dejaría en una situación "grave" a TVE, con una caída de audiencia que la dejaría con una cuota de pantalla del 8 por ciento.