El gigante siderúrgico parará la producción de vigas y busca recolocar a 285 de los 390 trabajadores de Villaverdemadrid. La fábrica de Villaverde de ArcelorMittal se ha convertido en la nueva víctima de la crisis. El presidente del gigante siderúrgico en España, Gonzalo Urquijo, desveló ayer la paralización de la actividad de fabricación de vigas y el comienzo de las negociaciones para intentar recolocar a 285 de los 390 trabajadores que forman la plantilla de esta factoría madrileña. Aunque el primer ejecutivo del grupo evitó pronunciar la palabra cierre (la sustituyó por parada indefinida), los planes de ArcelorMittal son dejar de fabricar productos largos en la planta y apostar sólo por las oficinas centrales y los servicios, entre los que se incluye el almacenamiento y gestión de chatarra y la distribución y transformación de acero. Pero esta actividad se puede realizar sin necesidad de emplear a más de cien personas. El resto deberá recolocarse en otras plantas que el grupo tiene en España. Aunque Urquijo no quiso adelantar acontecimientos, esta reubicación se antoja complicada teniendo en cuenta las posibilidades que tendrían los trabajadores afectados, ya que cualquier centro de Arcelor Mittal en el país no está a menos de 300 kilómetros de la capital. Un futuro inquietante El directivo no desveló si una segunda parte de este plan podría incluir el despido de estos trabajadores que no quieran recolocarse con unas indemnizaciones pactadas o, en el caso de los más mayores, una prejubilación. Urquijo dejó claro que se agotará en todos los ámbitos "el diálogo social" para buscar la mejor solución. Uno de los problemas de la factoría madrileña es que exporta el 84 por ciento de su producción, cuando en el ejercicio 2006 hasta el 40 por ciento de las vigas se consumían directamente en España. Debido a su situación estratégica, lejos de puertos y fronteras, éste es un gran problema. En su afán por el ahorro de costes, hace menos de dos años ArcelorMittal trasladó sus oficinas centrales en España, situadas en una zona céntrica, a Villaverde. Ahora serán la principal actividad junto con la chatarra para evitar las continuas pérdidas que se han registrado en los últimos años. Por otro lado, Gonzalo Urquijo reconoció que la compañía va a presentar una oferta para intentar suministrar el raíl que se empleará en la construcción del AVE La Meca- Medina. Aunque se desconoce el importe del contrato (que podría superar los 100 millones de euros), la intención del gigante siderúrgico es harcerse con él y abastecer al consorcio español en Arabia Saudí desde Asturias, donde ya suministra el material para las obras de alta velocidad ferroviaria en España.