La factura rondará los 1,60 euros por cada uno de los dos millones de usuariosmadrid. Los operadores de móviles españoles ya han hecho sus cuentas y estiman que los tres días de colapso de las conexiones de datos de BlackBerry generarán un coste en indemnizaciones cercano a los 3,2 millones de euros, importe a repartir entre dos millones de clientes en España. Así, el descuento en las facturas mensuales por cada usuario de BlackBerry rondará los 1,60 euros (a razón de 53 céntimos diarios), cifra que viene a ser la cantidad prorrateada del tiempo que el servicio estuvo suspendido. Cada compañía de telefonía móvil tiene perfectamente identificados a los titulares de tarifas planas con BlackBerry, por lo que éstos no necesitan presentar reclamaciones para disfrutar de las compensaciones. En el caso de Movistar y Orange, el descuento se aplicará directamente sobre la tarifa plana, mientras que Vodafone confirmó que sus clientes "serán compensados por la interrupción de estos servicios según la ley española", al tiempo que estudia la aplicación de otras medidas adicionales de compensación, como podría ser el regalo de cierto número de mensajes cortos (SMS). "Estamos valorando todas las posibilidades para que nuestros clientes se sientan recompensados y satisfechos. Podríamos regalar SMS u otros servicios de datos o conectividad, pero todavía no hemos decidido", indicaron a elEconomista fuentes de Vodafone. Lo que parece más complicado es que en España proliferen las denuncias por daños y perjuicios por la suspensión del servicio. Bosco Gispert, de Grupo Gispert Abogados, aseguró que el escaso importe de las indemnizaciones disuadirá a muchos clientes a acudir a los tribunales. "Al contrario de lo que ocurre en EEUU, el concepto de daño moral apenas está recompensado en España. Además, el perjuicio resulta de difícil evaluación al existir herramientas alternativas a BlackBerry y fácilmente sustituibles, como un simple mensaje corto", añade Gispert. El mismo abogado también descarta que la avería de BlackBerry anime a los usuarios a resolver sus contratos de permanencia con sus respectivos operadores. "Los jueces ponderarán el principio de conservación de los contratos y podrían desestimar las reclamaciones que pudieran resultar sospechosamente oportunistas", añade Gispert.