En la subasta podrían intervenir las cajas vascas y varios grupos extranjerosmadrid. La Caixa ha decidido participar en el primer tramo de la puja por la CAM, operación en la que participarán, entre otros, el Santander y BBVA. El consejo de administración de la entidad catalana autorizó ayer la presentación de una oferta no vinculante por la entidad intervenida el próximo lunes, último día para que los interesados acrediten sus opciones para absorber los activos de la alicantina, según fuentes financieras. Las tres entidades acuden así a la llamada del Banco de España para que la subasta no quede vacía. También se espera que el grupo vasco Kutxa Bank -formado por las tres cajas de la región- y alguna firma extranjera entre en el concurso. El Sabadell también podría sumarse, aunque sólo ratificaría una oferta en caso de que la alicantina fuera vendida por trozos. A partir de la próxima semana los candidatos tendrán acceso a toda la documentación relativa al estado de las cuentas y el balance de la CAM para determinar si a finales de octubre ponen sobre la mesa una puja vinculante. Los grandes bancos están presionando al supervisor para que cree una entidad con todos los activos tóxicos -que superan los 21.000 millones de euros- para evitar sustos indeseados en el futuro y para que el coste sobre el capital sea inferior al adquirir únicamente el negocio saneado, tal y como adelantó este periódico esta semana. Por el momento, el Banco de España no está dispuesto a cambiar las reglas del proceso. El organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez dará un Esquema de Protección de Activos (EPA) al comprador para que el Estado, a través del Frob, asuma el 80 por ciento de los primeros 2.500 millones de pérdidas y el 90 por ciento de las mismas a partir de este umbral. Además, concederá una línea de liquidez por importe de unos 5.000 millones para que el adjudicatario pueda afrontar los elevados vencimientos de deuda de la caja intervenida. Banco malo o venta por partes Las condiciones del mercado y el gran agujero son los principales temores de los candidatos para hacerse con la CAM, por lo que si el supervisor no modifica los parámetros de la subasta, ésta podría quedar vacía. En el sector no se descarta la posibilidad de que Ordóñez cree un 'banco malo' o, incluso, vender por partes todos los activos de la alicantina. La entidad está a la espera de conocer su valoración, realizada por tres consultoras independientes, para que el Frob inyecte los 2.800 millones prometidos el día de su intervención a cambio de un porcentaje que rondará el 100 por ciento del capital de Banco CAM, la filial a la que ha traspasado todos sus activos a excepción de los relativos a la obra social. Los expertos consideran que no sólo influirán las condiciones a la hora de presentar las ofertas, sino el volumen de red, que en el caso de la Caixa son numerosas en la Comunidad Valenciana; la fortaleza en la solvencia y la posibilidad de levantar capital en el mercado; y la tenencia de una cartera industrial potente para obtener plusvalías en caso de necesidad, como el caso de BBK y la catalana, entre otras. Los analistas consideran al Santander y a BBVA como favoritos. De hecho, ambos aumentarían su cuota de mercado en una zona donde cuentan con una reducida presencia. No obstante, el mercado podría penalizarlos. Los inversores están castigando todo aquello que esté relacionado con nuestro país y un incremento del peso del negocio español sobre el conjunto podría conllevar rebajas del rating y crecimientos en los costes de financiación. Ofertas conjuntas Por eso, los expertos consideran a Kutxa Bank como favorito. Uno de sus integrantes, BBK, ya se hizo el año pasado con CajaSur y su intención es duplicar su cuota de mercado, hasta tener 160.000 millones de activos. El grupo vasco, para abaratar la operación, podría buscar aliados y presentar una propuesta conjunta con otras entidades para después repartirse el negocio.