El socio portugués del Sabadell trata de zanjar la crisis institucionalLISBOA. Carlos Santos Ferreira presentó ayer su dimisión como máximo responsable de la Caixa Geral de Depósitos, condición indispensable para poder presentar su candidatura a la presidencia del Banco Comercial Portugal (BCP). Santos Ferreira, que cuenta con el apoyo de buena parte de los principales accionistas del mayor banco privado luso, comunicó su decisión al ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, en una reunión mantenida ayer. El banquero parece el candidato mejor colocado para acceder a la presidencia, porque cuenta con el apoyo del Banco Portugués de Investimento (BPI), máximo accionista del BCP (con el 9 por ciento de los títulos), aunque la aseguradora paneuropea Eureko, se muestra reticente ante el equipo que acompañará a Santos Ferreira. Fernando Ulrich, presidente ejecutivo del BPI dijo que Ferreira es "un buen candidato" para dirigir el BCP y que debe tener "manos libres" para escoger a sus más cercanos colaboradores en el nuevo Consejo de Administración. Inestabilidad En este sentido, Teixeira dos Santos ha mostrado su "preocupación" por la inestabilidad que vive el BCP, que está siendo investigado por las autoridades por supuesto fraude. La Comisión del Mercado Mobiliario de Valores -la CNMV portuguesa- analiza si son ciertas las denuncias de que el banco concedió créditos, por valor de 700 millones de euros, a sociedades off-shore (fuera de plaza) para que éstas comprasen acciones en los aumentos de capital de la entidad. BCP ha respondido que las pérdidas relacionadas con estos créditos ya fueron reflejadas en sus cuentas.