La actividad manufacturera se desacelera y el mercado inmobiliario todavía está "débil en general"nueva york. El azote de Irene y los vaívenes bursátiles de las últimas semanas volvieron a provocar nuevos achaques en la recuperación de Estados Unidos. El Libro Beige de la Reserva Federal, es decir, la recopilación de datos que realiza el banco central norteamericano antes de sus reuniones para debatir la política monetaria del país, determinó en su última edición que la economía de EEUU "continúa expandiendose" de forma moderada. Sin embargo, señaló que algunas de las 12 regiones consultadas experimentaron "una actividad económica debilitada o estable". Así, los médicos de la Fed determinaron que el crecimiento fue "modesto" en cinco districtos (Saint Louis, Minneapolis, Kansas City, Dallas y San Francisco) mientras que los siete restantes presentaron una expansión "más lenta", especialmente la áreas de Richmond y Filadelfia. "Varios distritos indicaron que la reciente volatilidad bursátil y la incertidumbre económica han provocado que se vuelven más cautelosos sobre sus perspectivas a corto plazo", señaló el informe. El gasto del consumidor aumentó en la mayoría de los distritos pero, si se descuenta la volatilidad de la compra de automóviles, el consumo fue plano en varias regiones a finales de agosto. Además, las evacuaciones provocadas por el azote del huracán Irene en el noreste del país, provocaron interrupciones entre las principales minoristas de la región de Nueva York, algo que podría pasar factura a corto plazo. Por su parte la producción fue mixta en todo el país y se "desaceleró" en muchos distritos, reconoció la Fed. La actividad manufacturera, que se erige como uno de los pulmones de la recuperación económica, se desaceleró en muchas áreas durante el pasado mes. Las regiones de Nueva York, Filadelfia y Richmond informaron sobre un descenso de la actividad. Otros distritos, Boston y Dallas registraron una desaceleración de la demanda de sus clientes europeos. Por su parte, la actividad manufacturera en Atlanta y Chicago creció a un ritmo más lento. La Fed destacó la "prudencia" a nivel empresarial e indica que los gastos de los consumidores, motor tradicional de la economía norteamericana, "progresaron ligeramente en la mayoría de las regiones" consideradas del país. Debilidad comercial Al mismo tiempo, los economistas del banco central de EEUU reconocieron que el mercado inmobiliario residencial y comercial continúa "débil en general". En lo que se refiere a la inflación, el Libro Beige indicó que bajó levemente, aunque los precios minoristas subieron en algunos distritos. Por otro lado, pese a que el informe del Departamento de Empleo indicase una creación nula de puestos de trabajo el pasado mes de agosto, el documento de la Fed señaló que el mercado laboral era en general "estable" y algunas regiones registraron una modesta mejoría. Eso sí, algunas zonas informaron sobre la falta de ingenieros, mecánicos y desarrolladores informáticos. En estas circunstancias y tras un verano intenso, donde las negociaciones sobre el techo de deuda en el Congreso, la rebaja de calificación de Standard & Poor´s y los problemas europeos sembraron las dudas sobre una posible recesión económica a ambos lados del Atlántico, el estancamiento parece hacerse realidad. Charles Evans, presidente de la Fed de Chicago y miembro del Comité de Mercados Abiertos de la Reserva Federal reconoció ayer desde Londres, que sus perspectivas económicas sobre EEUU se han deteriorado "de forma clara" durante el último mes. "Las condiciones hoy no son muy distintas de cuando la economía estaba sumida en una recesión", explicó. Ahora, toda la atención se centra sobre el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, y sus planes para reactivar el crecimiento económico, que podrían incluir una nueva recompra masiva de activos, es decir, la tercera entrega del Quantitative Easing (QE3). Bernanke hablará sobre la delicada situación de la economía estadounidense hoy en Minneapolis. Este será su último discurso antes de la próxima reunión del Comité de Mercados Abiertos de la Fed, y todo el mundo buscará cualquier señal que indique un nuevo impulso para el crecimiento.