Los consejos de administración votarán hoy la creación de la tercera mayor caja, con unos activos de 81.000 millonesLos consejos de administración votarán hoy la creación de la tercera mayor caja, con unos activos de 81.000 millonesLos consejos de administración votarán hoy la creación de la tercera mayor caja, con unos activos de 81.000 millonesvalladolid/madrid. Después de largas y complicadas negociaciones, los equipos directivos de Duero-España y Unicaja han sellado su proyecto de fusión, que tendrá que ser ratificado hoy por los consejos de administración de las dos entidades. Los miembros del máximo órgano rector fueron convocados a lo largo de la jornada de ayer. La reunión se producirá apenas 48 horas después de que la asamblea de la caja castellana aprobara por abrumadora mayoría el traspaso de su negocio financiero a un banco, operación imprescindible tanto para la fusión como para la segunda opción que ha barajado la caja castellana para recapitalizarse, como era seguir en solitario. La andaluza gana poder Aunque en la mañana de ayer, en círculos políticos de Castilla y León cundía el pesimismo sobre el buen fin de la operación ante la dureza de Braulio Medel para ceder poder en la futura entidad, al final ha habido acuerdo. Aunque todavía no ha trascendido la participación que tendrá cada uno en la nueva entidad, fuentes consultadas por elEconomista barajaban que Medel se reservaría entre un 70 y un 75 por ciento. Otras fuentes sostenían que finalmente la malagueña cedió para hacer posible el acuerdo y se quedará finalmente con el 70 por ciento. En abril ambas entidades preacordaron un reparto del 63 por ciento para la malagueña y del 37 por ciento para la castellano y leonesa. Con este pacto, el grupo castellano esquivará la entrada del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), ya que sus necesidades de capital ascienden a más de 450 millones. La integración entre Caja Duero-España y la andaluza Unicaja dará lugar a la tercera entidad del sector por activos y la cuarta por patrimonio neto. En concreto y según los últimos datos publicados por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), correspondientes al tercer trimestre de 2010, la nueva entidad contará con activos por 80.957 millones de euros, situándose por detrás de Bankia y La Caixa. Con la fusión, la nueva entidad contará en un principio con 1.793 oficinas, de las que 849 pertenecen a la caja castellana y leonesa y 944 a la andaluza. La red estará presente en todas las comunidades españolas, excepto Canarias, así como con 15 sucursales en el exterior. Está previsto que la sede social del grupo resultante se ubique en Málaga, aunque el acuerdo de intenciones establece la creación de distintas sedes operativas en Madrid, Salamanca y León. Estará presidido por Braulio Medel y el consejero delegado será Evaristo del Canto. El pacto ha pendido de un hilo en las últimas semanas debido a las diferencias entre ambas direcciones, sobre todo por el reparto de poder. La andaluza, tras conocer los resultados de una auditoría exhaustiva, presionó para conseguir incluso el 80 por ciento de la representación en los órganos de administración. Aunque en principio la operación no contará con ayudas públicas, no se descarta que a última hora el grupo reclame una petición de recursos al Banco de España. La recepción de estos fondos estarían con- dicionados a que fueran en forma de préstamo y no de capital.valladolid/madrid. Después de largas y complicadas negociaciones, los equipos directivos de Duero-España y Unicaja han sellado su proyecto de fusión, que tendrá que ser ratificado hoy por los consejos de administración de las dos entidades. Los miembros del máximo órgano rector fueron convocados a lo largo de la jornada de ayer. La reunión se producirá apenas 48 horas después de que la asamblea de la caja castellana aprobara por abrumadora mayoría el traspaso de su negocio financiero a un banco, operación imprescindible tanto para la fusión como para la segunda opción que ha barajado la caja castellana para recapitalizarse, como era seguir en solitario. La andaluza gana poder Aunque en la mañana de ayer, en círculos políticos de Castilla y León cundía el pesimismo sobre el buen fin de la operación ante la dureza de Braulio Medel para ceder poder en la futura entidad, al final ha habido acuerdo. Aunque todavía no ha trascendido la participación que tendrá cada uno en la nueva entidad, fuentes consultadas por elEconomista barajaban que Medel se reservaría entre un 70 y un 75 por ciento. Otras fuentes sostenían que finalmente la malagueña cedió para hacer posible el acuerdo y se quedará finalmente con el 70 por ciento. En abril ambas entidades preacordaron un reparto del 63 por ciento para la malagueña y del 37 por ciento para la castellano y leonesa. Con este pacto, el grupo castellano esquivará la entrada del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), ya que sus necesidades de capital ascienden a más de 450 millones. La integración entre Caja Duero-España y la andaluza Unicaja dará lugar a la tercera entidad del sector por activos y la cuarta por patrimonio neto. En concreto y según los últimos datos publicados por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), correspondientes al tercer trimestre de 2010, la nueva entidad contará con activos por 80.957 millones de euros, situándose por detrás de Bankia y La Caixa. Con la fusión, la nueva entidad contará en un principio con 1.793 oficinas, de las que 849 pertenecen a la caja castellana y leonesa y 944 a la andaluza. La red estará presente en todas las comunidades españolas, excepto Canarias, así como con 15 sucursales en el exterior. Está previsto que la sede social del grupo resultante se ubique en Málaga, aunque el acuerdo de intenciones establece la creación de distintas sedes operativas en Madrid, Salamanca y León. Estará presidido por Braulio Medel y el consejero delegado será Evaristo del Canto. El pacto ha pendido de un hilo en las últimas semanas debido a las diferencias entre ambas direcciones, sobre todo por el reparto de poder. La andaluza, tras conocer los resultados de una auditoría exhaustiva, presionó para conseguir incluso el 80 por ciento de la representación en los órganos de administración. Aunque en principio la operación no contará con ayudas públicas, no se descarta que a última hora el grupo reclame una petición de recursos al Banco de España. La recepción de estos fondos estarían con- dicionados a que fueran en forma de préstamo y no de capital.valladolid/madrid. Después de largas y complicadas negociaciones, los equipos directivos de Duero-España y Unicaja han sellado su proyecto de fusión, que tendrá que ser ratificado hoy por los consejos de administración de las dos entidades. Los miembros del máximo órgano rector fueron convocados a lo largo de la jornada de ayer. La reunión se producirá apenas 48 horas después de que la asamblea de la caja castellana aprobara por abrumadora mayoría el traspaso de su negocio financiero a un banco, operación imprescindible tanto para la fusión como para la segunda opción que ha barajado la caja castellana para recapitalizarse, como era seguir en solitario. La andaluza gana poder Aunque en la mañana de ayer, en círculos políticos de Castilla y León cundía el pesimismo sobre el buen fin de la operación ante la dureza de Braulio Medel para ceder poder en la futura entidad, al final ha habido acuerdo. Aunque todavía no ha trascendido la participación que tendrá cada uno en la nueva entidad, fuentes consultadas por elEconomista barajaban que Medel se reservaría entre un 70 y un 75 por ciento. Otras fuentes sostenían que finalmente la malagueña cedió para hacer posible el acuerdo y se quedará finalmente con el 70 por ciento. En abril ambas entidades preacordaron un reparto del 63 por ciento para la malagueña y del 37 por ciento para la castellano y leonesa. Con este pacto, el grupo castellano esquivará la entrada del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), ya que sus necesidades de capital ascienden a más de 450 millones. La integración entre Caja Duero-España y la andaluza Unicaja dará lugar a la tercera entidad del sector por activos y la cuarta por patrimonio neto. En concreto y según los últimos datos publicados por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), correspondientes al tercer trimestre de 2010, la nueva entidad contará con activos por 80.957 millones de euros, situándose por detrás de Bankia y La Caixa. Con la fusión, la nueva entidad contará en un principio con 1.793 oficinas, de las que 849 pertenecen a la caja castellana y leonesa y 944 a la andaluza. La red estará presente en todas las comunidades españolas, excepto Canarias, así como con 15 sucursales en el exterior. Está previsto que la sede social del grupo resultante se ubique en Málaga, aunque el acuerdo de intenciones establece la creación de distintas sedes operativas en Madrid, Salamanca y León. Estará presidido por Braulio Medel y el consejero delegado será Evaristo del Canto. El pacto ha pendido de un hilo en las últimas semanas debido a las diferencias entre ambas direcciones, sobre todo por el reparto de poder. La andaluza, tras conocer los resultados de una auditoría exhaustiva, presionó para conseguir incluso el 80 por ciento de la representación en los órganos de administración. Aunque en principio la operación no contará con ayudas públicas, no se descarta que a última hora el grupo reclame una petición de recursos al Banco de España. La recepción de estos fondos estarían con- dicionados a que fueran en forma de préstamo y no de capital.