Tras los peores resultados en la historia de la entidad, el Gobierno chino acude al rescate inyectando 5.000 millones Nueva york. Goldman Sachs, el único superviviente a las tóxicas hipotecas de alto riesgo, ya dio muestras de debilidad el pasado martes asegurando que noviembre había sido un mes nefasto y advertía sobre su futuro a corto plazo. Ayer le tocaba el turno a Morgan Stanley, que daba el pistoletazo de salida para las vacas flacas en Wall Street. El banco de inversión registró alrededor de 9.400 millones de dólares en amortizaciones, lo que le ha obligado a aceptar la ayuda de 5.000 millones de dólares ofertada por el brazo financiero del Gobierno chino, China Investment Corporation (CIC). Desde luego el panorama no pinta nada claro dentro del segundo banco financiero más grande de EEUU, sobre todo si se tiene en cuenta que Morgan Stanley ha triplicado la cantidad de pérdidas previamente anunciada en noviembre. Esta situación ha provocado un verdadero holocausto dentro de la compañía que, por primera vez en sus 73 años de historia, ha registrado una pérdida trimestral. Ante esta situación, John Mack, consejero delegado de la entidad, se ha declarado responsable del fracaso y, por ello, sacrificará su bonus anual. Temporada de vacas flacas Morgan Stanley ha sido el último miembro de Wall Street en sufrir en sus propias carnes los avatares de la crisis de crédito que ha provocado más de 100.000 millones de dólares en pérdidas durante los últimos seis meses. Y tampoco es el primero en echar mano de inversiones estatales extranjeras para insuflar aire a sus cuentas. Sólo hace falta echar un ojo a la ayuda que Abu Dhabi ofreció a Citigroup. China no obtendrá más del 9,9 por ciento de acciones de Morgan Stanley cuando su inversión actual se transforme en acciones comunes, allá por 2010. Morgan Stanley registró pérdidas por importe neto de 3.588 millones de dólares en el cuarto trimestre, frente al beneficio neto de 2.206 millones de dólares en el mismo periodo de 2006. Asimismo, los ingresos netos de la entidad registraron un resultado negativo de 450 millones de dólares durante el último trimestre de su ejercicio fiscal, frente a los 7.849 millones de dólares del mismo periodo del año pasado. Ahora a prepararse para los resultados de Bear Stearns, que los presenta hoy. Esperemos que tenga los salvavidas a mano.