El Gobierno busca apoyos para sacar adelante hoy el proyecto en el Congresomadrid. El Gobierno aprobó el pasado martes el canon digital que gravará, a partir del año que viene, aparatos como el móvil, el MP3, el CD, el DVD o el disco duro del ordenador. Pero no se preocupen. Ayer, tan sólo un día después de que se anunciaran las tasas, el ministro de Industria, Joan Clos, avanzó ya que estudiará como sustituirlo o incluso eliminarlo. "Intentaremos encontrar medidas que puedan sustituir al canon para encontrar un mecanismo mejor con el que financiar los derechos de autor", aseguró. Y eso que los Santos Inocentes son la semana que viene. Eso sí, para evitar nuevas amenazas por parte de los actores, insistió en que "el canon digital es un esfuerzo económico asumible" para los ciudadanos. "Es la medida más pragmática, equitativa y proporcionada por el momento", dijo. El canon digital supondrá un coste anual para los consumidores españoles de 110 millones de euros, el 20 por ciento aproximadamente de lo que se recauda en toda la Unión Europea por este concepto. Los Ministerios de Cultura y de Industria han propuesto que los CD vírgenes sean gravados con un canon de 0,17 euros, los teléfonos móviles con 1,5 euros, y los MP3 con 3,15 euros. Aunque el canon entrará en vigor en enero, el Congreso tendrá que votar hoy, sin embargo, una enmienda aprobada por el Senado en la que se insta al Gobierno a eliminar esta nueva tasa, considerada "discriminatoria y abusiva" por todos los partidos políticos, salvo por el PSOE. El Ejecutivo está buscando pactos con los que sacar adelante el proyecto y, según algunas fuentes, podría contar ya al menos con el apoyo de CiU y, posiblemente, con el de Izquierda Unida. El PP ha anunciado ya que votará en contra, sobre todo después de que su líder, Mariano Rajoy, asegurara que si llega al Gobierno eliminará la tasa. Vicente Martínez-Pujalte, portavoz adjunto del grupo parlamentario Popular en el Congreso, acusó ayer al Gobierno de "comprar voluntades con dinero público, por su apoyo al establecimiento del nuevo canon digital, como reclamaban los autores". Un canon estrafalario En la misma línea que Joan Clos, el presidente de Aetic, Jesús Banegas, insistió en que el canon tiene los días contados. "No tiene sentido, es anacrónico y estrafalario", comentó el patrón del sector tecnológico, que se mostró convencido de que "el próximo Gobierno lo eliminará", incluso si de las elecciones vuelve a salir el PSOE. "Es insostenible, incluso para el Gobierno que lo ha aprobado", sentenció. No obstante, aseguró que las empresas de Aetic cumplirán la ley. El directivo recordó que el canon no acabará con la piratería y recomendó desarrollar otros cauces para combatir el fraude y defender los legítimos derechos de propiedad intelectual. "Si algunos son artistas nosotros somos ingenieros", declaró. Al tiempo que ironizó señalando que el sector tecnológico, que tiene más empresas que artistas hay en España, es realmente el mayor creador del país, puesto que destinó a innovación 1.800 millones de euros el año pasado. Rebatiendo los argumentos de las sociedades gestoras cuando indican que el canon está contemplado en la práctica totalidad de las legislaciones europeas, Banegas afirmó que "sólo afecta a menos de la mitad de los países de la UE, a menos de un tercio de los europeos y sólo al seis por ciento de los países del mundo". Según Aetic, el nuevo canon "no producirá los efectos nefastos previstos, pero distorsionará el mercado porque desviará las compras a países como Holanda, Italia o Portugal, y a Internet".