Amplía garantías para respaldar transacciones de la entidad y plantea la posibilidad de dividirla entre bancos nacionales londres. El Gobierno británico anunció ayer que ampliará las garantías de las transacciones de los clientes y acreedores del Northern Rock. A petición del propio banco, el Ejecutivo respaldará las operaciones descubiertas y aquellas cuya cantidad a pagar exceda del valor de las garantías ofrecidas como colateral. El tesoro explicó que esta ampliación está en línea con los objetivos de estabilidad financiera y protección de los contribuyentes y consumidores anunciados por las autoridades británicas. "No habrá ningún cambio en las garantías de los depósitos de particulares en Northern Rock, que siguen completamente respaldados por la Tesorería", señaló el Ministerio de Finanzas. "Northern Rock pagará el canon correspondiente por la extensión de los acuerdos de garantía y lo mantendrá mientras dure el actual periodo de inestabilidad en los mercados financieros", añadió. El portavoz del primer ministro, Michael Ellan, explicó que esta decisión daría "un respiro a la entidad en su búsqueda de encontrar un comprador". Por ahora tan sólo quedan dos grupos, el que lidera Virgin y el de la empresa de capital riesgo Olivant, que dirige el expresidente de Abbey, en la subasta del banco, que se vio obligado a pedir un préstamo de emergencia al banco central el pasado verano tras fallar su estrategia de financiación. El principal reto para estos pretendientes es encontrar el dinero con el que afrontar la deuda del banco, que ya asciende a 35.000 millones de euros. Cada vez parece más probable la opción de nacionalizar la entidad, si no consigue un comprador antes de febrero, cuando termina el plazo dado por la Comisión Europea para encontrar una solución. Ayer, el diario The Guardian revelaba que el Gobierno está preparando un plan para dividir el Northern Rock entre los principales bancos británicos después de nacionalizarlo. Así, reduciría su deuda, ayudaría a reducir la carga sobre los contribuyentes y evitaría que el mercado hipotecario se vea afectado.