El banco de Dimon mejora su consejo en plenos rumores de compra de BoFanueva york. En plena marea de cuchicheos y con la tensión a flor de piel, Bank of America se ha convertido en la comidilla del sector financiero. En un escenario que bien rememora las semanas previas al colapso del otro gran banco de inversión Lehman Brothers, los vaivenes en el precio de la acción del mayor prestamista de Estados Unidos han desatado todo tipo de cábalas, entre ellas la posible compra por parte de J.P.Morgan. De momento, la entidad capitaneada por Jamie Dimon endulzaba el contexto con una mejora de recomendación para Bank of America. Los analistas de J.P.Morgan elevaron a Bank of America hasta neutral desde infraponderar, tras considerar que las presiones actuales sobre la entidad de Brian Moynihan "podrían incrementar las posibilidades de un acontecimiento positivo para su crédito, como sería una posible ampliación de capital". Sin embargo los expertos del banco señalaron que BofA podría necesitar entre 12.000 y 25.000 millones de dólares en capital, si se tienen en cuenta los requisitos de Basilea III para 2012. Por su parte, Bank of America Merrill Lynch se tomó ayer la justicia por su mano y agració a J.P.Morgan con una rebaja de sus perspectivas de beneficios para el tercer trimestre de este año. Así, su analista Guy Moszkowski, considera que el banco presidido por Dimon registrará un beneficio por acción de 1,07 dólares frente a los 1,30 dólares previamente estimados y los 1,24 dólares que baraja el consenso del mercado. Además rebajó su precio objetivo hasta los 51 dólares por título desde los 55 dólares anteriores. Moszkowski también rebajó su precio objetivo para el resto de los gigantes financieros como Goldman Sachs, Morgan Stanley o Citigroup.