Cede ante los sindicatos, que ofrecieron moderación salarial sólo si el Ejecutivo retiraba la modificación de este contratomadrid. Junto a la modificación tributaria para aumentar la presión fiscal a las grandes fortunas, el Consejo de Ministros de mañana también aprobará un decreto-ley de medidas laborales. El presidente del Gobierno ya detalló este paquete en su comparecencia del pasado día 29 de julio, pero en las últimas semanas ha cambiado de arriba a abajo. En primer lugar, el Ejecutivo ha renunciado a flexibilizar el contrato a tiempo parcial. El empresario ya no podrá modificar el 10 por ciento de la jornada según la producción, tal y como se había anunciado. Una medida que, según el mi- nistro de Trabajo, ocuparía a más personas, pero que cayó en desgracia ante la oposición sindical. Y es que hace escasas semanas, las centrales enviaron una carta al presidente del Gobierno ofreciéndole la extensión de la moderación salarial a cambio de algunas concesiones, como que descartara la reforma del contrato a tiempo parcial o que incrementara el Impuesto sobre Patrimonio. A falta de un día para aprobar estas medidas, el Ministerio continúa intercambiando propuestas con los representantes de los trabajadores. Ayer mismo, Trabajo envió el borrador de las medidas, que no hacía ninguna mención al tiempo parcial. "Una oportunidad perdida", a juicio de la patronal, pero tildada de "positiva" por los sindicatos. Encadenar temporales La segunda gran novedad del borrador es que deshace una parte de la reforma laboral que se aprobó en 2010. Exactamente, quedarán anulados durante dos años los límites que se incluyeron al encadenamiento de contratos temporales. La reforma obligaba a las empresas a hacer fijos a aquellos trabajadores que durante un plazo de 30 meses hubieran estado 24 meses contratados temporalmente, pero estos artículos se suprimirán durante dos años para reactivar el empleo. Esta maniobra del Gobierno recuerda a la reforma que llevó a cabo Joaquín Almunia en 1994, cuando fomentó el contrato temporal para reactivar la contratación. Las centrales sindicales manifestaron ayer su rechazo a esta medida. "Es apostar, directamente, por la temporalidad, por el empleo de mala calidad y con menos derechos", afirmó el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer. Además, Ferrer explicó que esta reforma es contraria al acuerdo tripartito alcanzado en 2006, en el que se pretendía "potenciar la contratación estable, la contratación indefinida y limitar y reducir la contratación temporal, sobre todo la abusiva". De formación hasta los 30 El tercer pilar de la reforma es introducir el modelo de formación dual alemán, que combina prácticas con cualificación teórica. El Gobierno adaptará esta idea al mercado laboral español a través de la creación de un nuevo contrato de formación y aprendizaje, según enuncia el borrador, para jóvenes de hasta 30 años. Esta modalidad estará vigente durante dos años y pretende mejorar la cualificación de jóvenes desempleados sin formación. Una vez cumpla este plazo, la edad límite se rebajará a 25 años. El contrato contempla que el 75 por ciento de la jornada se dedique a trabajar en una empresa y el resto a realizar actividades formativas. La idea se asemeja sorprendentemente a la petición que hizo CEOE hace dos años. Entonces el responsable del área laboral pidió un contrato para jóvenes en prácticas de hasta 30 años, que tuviera acción protectora de la Seguridad Social, al igual que incluye este nuevo contrato. La patronal también pidió que tuviera una remuneración similar al salario mínimo. Por ahora, en esta propuesta no se conoce si habrá algún límite en cuanto al salario. Fondo de capitalización y otras Entre el resto de medidas que se aprobarán mañana, se encuentra la prórroga de la ayuda de los 400 euros para parados que hayan agotado las prestaciones. También destaca el aplazamiento para el primer semestre de 2013 de la creación del fondo de capitalización de despido, el conocido modelo austríaco. Para cubrir este hueco, se prorrogará la acción del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) de subsidiar ocho días de los despidos procedentes del contrato de fomento. También se prevé la renovación de las bonificaciones de cotizaciones en las transformaciones de temporales en indefinidos. El borrador incluye la fusión del Fogasa y del Servicio Público de Empleo, el antiguo Inem, en un solo organismo.