Consideran que la demanda de Cepsa contra BP demuestra que no hay competencia en el sectorAOP asegura que sus Principios éticos cumplen la ley y desconoce la denuncia en la Comisiónmadrid. La Confederación Española de Estaciones de Servicio y la Asociación de Gestores, que representan a más del 45 por ciento del sector en España, están frotándose las manos. La demanda que presentó Cepsa contra BP desvelando la obligatoriedad de cumplir los llamados "Principios Éticos" les ha permitido presentar una denuncia ante la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea contra las petroleras que forman parte de la Asociación española de Operadores Petrolíferos (AOP). Es decir, Agip, BP, Cepsa, ERG, Exxon Mobil, Galp, Tamoil, Repsol YPF, Saras, Disa y Total. Los propietarios de estaciones de servicio solicitan a la Comisión Europea que investigue si estas compañías han incurrido en prácticas anticompetitivas en los últimos años. Para reforzar su queja de que las petroleras han actuado en España como un cartel, los denunciantes se basan en el acuerdo de la Asociación, adelantado en la edición de ayer por este periódico. En dicho documento se establecen unos límites dentro de los cuáles las petroleras deben desarrollar sus prácticas en el sector, pero los gasolineros indican que lejos de recoger los buenos usos han pasado a convertirse en prácticas anticompetitivas que impiden el ya de por sí difícil acceso de competidores al mercado, así como un cierre forzado del mismo que se viene perpetuando desde la finalización del monopolio de petróleos. El director general de AOP, Álvaro Mazarrasa, por contra, consideran que se adapta plenamente a la legislación vigente y recuerda que el pacto se presentó junto con el por entonces presidente del TDC, Amadeo Petitbó. La Asociación también asegura que desconoce la existencia de esta denuncia ante Bruselas. Según fuentes de la CEEES, en España alrededor del 80 por ciento de las estaciones de servicio no tienen niguna libertad para la fijación de precios, ya que la mayoría adopta la forma de contratos de comisión o de agencia, mientras que al restante 20 por ciento le corresponden contratos de reventa de combustibles. De hecho, por este motivo, la Comisión Nacional de Competencia ha abierto una investigación por la fijación de precios de Repsol YPF, Cepsa y BP, tal y como adelantó elEconomista, y la CNE ha decidido analizar la situación de las petroleras en los mercados locales. La demanda que se ha presentado por cartel en Bruselas está basada en la denuncia de Cepsa contra BP. Los propietarios de estaciones de servicio indican que, durante los últimos doce años, el mercado español de hidrocarburos se ha comportado como un modelo de seguimiento al líder, Repsol YPF, y demostrando que el pacto no ha sido inocuo sino que ha limitado la entrada de nuevos operadores. Los propietarios de estaciones de servicio de Repsol YPF, por ejemplo, tienen en estos momentos un mediador, Laes Nexia, que fija el precio a pagar por los gasolineros a las petroleras para poder quedar liberadas. El TDC obligó en mayo a ceder puntos de venta a BP y ahora la Comisión de Competencia está analizando la actuación de Cepsa. El Gobierno cree que es necesario reforzar la inspección de la Comisión Nacional de Energía.