Pone a la venta también su red mundial de teatros por 400 millones de eurosmadrid. El conglomerado empresarial de la SGAE que creó su expresidente, Teddy Bautista, pasará pronto a la historia. La entidad ha puesto en marcha un plan para desprenderse de toda la red mundial de auditorios, teatros y espacios escénicos -una decena si se cuenta el Auditorio de Sevilla, en construcción- por 400 millones de euros. Según han confirmado fuentes próximas a la nueva junta directiva, esto ha supuesto además la ruptura de las negociaciones con Caja Madrid para la compra del Palacio de la Música, en la Gran Vía madrileña. La entidad financiera, que compró este emblemático edificio con el objetivo de convertirlo en uno de los grandes espacios escénicos de la capital, ha desembolsado 30 millones por la adquisición y 20 millones más por las obras de reforma. En principio, está previsto que el Palacio de la Música, que durante muchos años albergó salas de cine, reabriera el año que viene. Para la SGAE era la guinda del pastel, que finalmente no se llevará a cabo. Adiós a la apuesta de Teddy El holding Arteria, que agrupa todos sus teatros y espacios culturales, cuenta ya en la capital de España con el teatro Häagen-Dazs Calderón, el Coliseum (Madrid) y la Sala Berlanga. Además, posee también, entre otros, el Campos Elíseos en Bilbao, el Paral·lel en Barcelona, el Metropólitan de Buenos Aires (Argentina) o La Casona, en Ciudad de México. En Nueva York gestiona también uno de los teatros más emblemáticos de Broadway, el Manhattan Transfer, aunque en este caso no es de su propiedad. Según las últimas cuentas de Arteria, el holding ha invertido más de 254 millones en esta red, que "no pueden mantener económicamente", según aseguran fuentes cercanas a la sociedad de gestión. Y todavía tiene que afrontar la finalización del Auditorio de la Cartuja de Sevilla. Esta monumental obra, presupuestada en 60 millones, incluye un espacio comercial donde se proyectó la apertura de tiendas y restaurantes. El problema es que para levantar su imperio, Bautista, que está imputado ahora por desvío de fondos ante la Audiencia Nacional, utilizó el dinero de los derechos de los autores, avalando con ellos créditos de Arteria por un importe de hasta 86 millones de euros. Aunque la idea de deshacerse de los teatros de Arteria empieza a coger mucha fuerza entre los socios de la SGAE, lo cierto es que no se podrá hacer nada hasta que no se elija una nueva junta directiva, se forme el consejo de dirección y se nombre al presidente y los consejeros. "Con la junta en funciones todo se ha paralizado. No tienen la capacidad para continuar con ninguna operación ni para poner nada en venta, todo queda en manos del próximo equipo de gobierno", explicaron fuentes cercanas a la SGAE. La aventura de Arteria nació hace dos años con el objetivo de crear espacios para promocionar a nuevos artistas. El proyecto, que contaba con un presupuesto inicial de 300 millones de euros, ha desarrollado una red de más de 160.000 metros cuadrados con sedes en todo el mundo que compite con las empresas privadas. Además de la investigación abierta por la Audiencia Nacional, el arquitecto de la SGAE en gran parte de todos estos teatros, Santiago Fajardo, había denunciado ya irregularidades en las cuentas y presupuestos inflados, lo que provocó que Teddy Bautista prescindiera de su estudio.