En un último giro, el gobierno cancela la compra de 197 helicópteros militares por valor de 600 millones de eurospekín. Si EADS pone un circo, le crecen los enanos. El último revés para el consorcio aeroespacial europeo aconteció ayer con el anuncio de la India de cancelar un contrato de compra de 197 helicópteros militares AS 550 C3 Fennec de su subsidiaria Eurocopter, valorado en 600 millones de dólares. Pese a que el trato con el grupo europeo se daba por cerrado, el Ministerio de Defensa del país asiático se apresuró ayer a confirmar que abría de nuevo la licitación a otras ofertas. La quiebra del acuerdo coincide con las sospechas, levantadas por los medios de comunicación, de que pudieron haberse cometido irregularidades en el proceso de licitación, entre ellas haber usado intermediarios pese a que bajo legislación india son ilegales cuando se trata de ofertas militares. El portavoz del Ministerio de Defensa indio, Sitanshu Kar, se limitó a decir que el Gobierno de Nueva Delhi abriría de nuevo el proceso de compra de los casi 200 helicópteros "con varias propuestas nuevas en dos o tres meses". Y, pese a que no hizo referencia alguna a las causas que han provocado la cancelación del acuerdo con EADS, no tuvo reparo en reconocer que las informaciones periodísticas publicadas en relación al caso eran "más o menos correctas". Por su parte, el consorcio europeo EADS, cuya subsidiaria Eurocopter es el primer fabricante de helicópteros militares y civiles del mundo, no hizo ayer comentarios aunque en los días previos aseguró que cumple rigurosamente las regulaciones vigentes. En cualquier caso, para el consorcio europeo la decisión de Nueva Delhi no puede tener peores consecuencias. Por un lado, pierde una jugosa venta de 600 millones de dólares que habría supuesto una producción continuada durante los próximos seis años. Por otro, y quizás más importante, EADS recibe un significativo batacazo en uno de los mercados más prometedores del mundo para la aviación civil, razón por la que Airbus pretende invertir 2.500 millones en los próximos 15 años. Por si fuera poco, los europeos pierden también el paso en el negocio de la futura modernización de la flota de helicópteros militares indios. Para reemplazar las tres cuartas partes de sus helicópteros de fabricación soviética deberá invertir 4.000 millones de dólares.