londres. Dos de los cuatro grandes supermercados británicos, Asda y Sainsbury's, han admitido haber pactado los precios de productos como la leche y el queso junto con otras compañías lácteas, después de la investigación llevada a cabo por la Oficina del Comercio Justo británico (OFT, en inglés). La OFT publicó el viernes que había impuesto sanciones de 116 millones de libras (160 millones de euros) a un total de diez empresas. La peor parada fue Sainsbury's, sancionada con 26 millones de libras. La OFT halló evidencias de que se habían acordado los precios entre 2002 y 2003, al darse cuenta de que mientras los precios de los productos lácteos subían, los precios que recibían los granjeros se estancaban. Concretamente, subieron tres peniques el precio de la pinta de leche y 15 peniques el cuarto de libra de mantequilla. La OFT tenía sospechas de que los cuatro grandes supermercados estaban involucrados, pero no encontró nada contra Morrison´s y Tesco.