La firma catalana crece con fuerza y gana ya 12,5 euros por cada cien que ingresamadrid. El sector español de la moda cambia de patrón. Al menos, en lo que a rentabilidad se refiere. Mango, la cadena catalana creada por los hermanos Isaac y Nahman Andic, de origen turco, ha sabido meter mejor que nadie la tijera, controlar sus costes y aumentar sus ingresos. Y el resultado no ha tardado en llegar. Por primera vez ha conseguido superar a Inditex y se ha convertido en la cadena de moda española más rentable. Aunque la diferencia entre uno y otro es todavía muy pequeña, lo importante para Mango es que la tendencia se está acentuando en los últimos años a su favor. En 2006, y según las cuentas que ha depositado en el Registro Mercantil de Barcelona, esta firma ganó 12,5 euros por cada cien que ingresó; es decir, cuatro más que hace sólo tres años. ¿Y qué ha hecho durante ese tiempo Inditex? Tampoco se ha quedado atrás y aunque ha conseguido también controlar sus costes, lo ha hecho en menor proporción. En el pasado ejercicio obtuvo una rentabilidad del 12,2 por ciento. Liderazgo español Y aún así, hay motivos de celebración. Tanto los responsables de una como de otra empresa pueden estar satisfechos porque superan con creces los registros alcanzados por su sector. Entre las grandes, tan sólo una empresa consigue superarlas a nivel mundial: la sueca H&M, que ha alcanzado un índice de rentabilidad del 15,7 por ciento. Pero todas las demás están por detrás. La norteamericana GAP, la cadena de moda más grande del mundo, tiene una rentabilidad del 4,8 por ciento y Benetton, la que cuenta con mayor número de tiendas, apenas alcanza el 6,5 por ciento. Y en el mercado español la situación es muy parecida. Cortefiel, otra de las tres grandes firmas de moda, tiene una rentabilidad de sólo el 6,4 por ciento, según las cuentas de 2005. Mango e Inditex sacan así partido a su lucha titánica por el mercado de la ropa más joven. De momento, la cadena catalana es más rentable, pero eso no quiere decir que sea más grande ni que crezca más rápido. En ese terreno nadie puede todavía con el imperio de Amancio Ortega, que alcanzó una facturación el año pasado de 8.196 millones de euros y tuvo un beneficio de 1.001 millones, un 24,06 por ciento más que el ejercicio anterior. Mango está dispuesto a plantar batalla, pero es todavía es una empresa mucho más pequeña. En 2006, esta firma alcanzó unos ingresos de 990 millones -1.257 millones de euros si se tiene en cuenta el volumen de negocio de toda la cadena, incluida las franquicias- y su beneficio creció algo menos que los de su rival, un 20,3 por ciento. Lo cierto es que Inditex y Mango compiten cara a cara en cada rincón del globo. La primera, propietaria además de Zara de firmas como Massimo Dutti, Pull & Bear, Stradivarius o Berskha, cuenta ya con 3.594 establecimientos en 68 países. En los últimos años, está recomprando algunas de sus franquicias para asumir el control directo sobre el negocio y ha puesto en marcha ambiciosos planes de crecimiento tanto en Europa como en Asia, dejando por el momento en un segundo plano el mercado norteamericano. En su afán por crecer, la empresa gallega también ha entrado en el segmento de la decoración del hogar con Zara Home. Una cadena de establecimientos con los que han roto el molde, al ofrecer moda para la casa a precios asequibles. Nació hace cuatro años y está presente en 20 países con más de 150 tiendas. Mango también ha pisado a fondo el acelerador. Con más de 1.000 establecimientos en 83 mercados, es la firma española con una mayor proyección internacional. Y su ambición no tiene freno. Recientemente, ha puesto en marcha un plan para triplicar en diez años su tamaño, alcanzar las 3.000 tiendas y conquistar, sobre todo, los mercados asiático y norteamericano. En este último país ha sabido potenciar su marca vía online, comercializando gran parte de su ropa a través de su web. Una estrategia que le ha valido para alcanzar popularidad y para seguir creciendo. A día de hoy cuenta con 16 establecimientos repartidos en territorio estadounidense, el último recientemente inaugurado en Nueva York, ciudad en la que aún no estaba y que se había convertido en una de sus asignaturas pendientes. Pero ahí no queda la cosa. En los próximos tres meses la firma prevé abrir tres tiendas más en EEUU. El objetivo de Mango es ganar la partida a Inditex y uno de los instrumentos que está empleando es hacerlo mediante la firma de alianzas con socios locales, lo que le permitiría acelerar el desarrollo. La mitad de las tiendas que se abran serán en propiedad, pero el resto se gestionarán así en régimen de franquicia. Y para no ser menos que su rival Zara volverá a a lucir la próxima primavera moda para hombre en sus escaparates. Además, quiere que el topónimo Barcelona esté ligado de forma permanente a su marca, para lo que ha comenzado negociaciones con el Ayuntamiento de la ciudad condal.