El supervisor insiste en vísperas de los test de estrés que sólo el 8% del sistema precisa del FrobMADRID. El Banco de España ha vuelto a dar un repaso al proceso de reestructuración de las cajas y ha aprovechado para recordar, a sólo dos días de los test de estrés, que las cajas que soliciten que el Frob entre en su capital y tengan un plan de negocio inviable o lo incumplan, serán vendidas a un tercero "a través de un procedimiento que asegure la competencia". Hay cuatro grupos de cajas, ahora reconvertidas en bancos, que han pedido la ayuda pública como camino principal para alcanzar las nuevas exigencias de capital. Son Novacaixagalicia, Unnim, la CAM y CatalunyaCaixa, que en conjunto suponen el 8 por ciento de los activos del sistema bancario español, un porcentaje pequeño que el supervisor ha querido destacar en vísperas de unos test de estrés que serán particularmente estrictos con las entidades españolas. Según los datos del Banco de España, el esfuerzo de saneamiento de las cajas de ahorros, por la constitución de diversas provisiones, se traduce en 55.000 millones de euros (el 5 por ciento del PIB) desde 2008 a 2010, que han restado de sus cuentas de resultados. Las minisvalías reconocidas en créditos y en inmuebles adjudicados, por su parte, han restado 22.000 millones de euros a sus recursos propios. Las provisiones genéricas y las subéstandar, propias del sistema español, han sido excluidas del cómputo de los ratios de capital por la autoridad europea EBA, lo que supondrá dejar fuera del cálculo unos 17.000 millones de euros y hará que las entidades españolas partan de una situación de desventaja respecto a sus homólogas europeas.