La moneda única es de las primeras en sufrir el recorte al depreciarse frente al dólarLa moneda única es de las primeras en sufrir el recorte al depreciarse frente al dólarMadrid. Todavía los mercados financieros estaban digeriendo el recorte de calificación a Portugal, que hizo el pasado 5 de julio, hasta Ba2, cuando Moody's le ha colgado el sambenito de bono basura a las emisiones de deuda de Irlanda. Concretamente, el recorte ha sido desde Baa3 hasta Ba1, con lo que bonos irlandeses se consideran títulos en los que el pago de intereses más principal están sometidos a una incertidumbre considerable. Moody's explica que esta rebaja se toma por el deterioro de las finanzas públicas y las pobres perspectivas macroeconómicas del país. Además, considera que la incertidumbre creada por las pruebas de estrés de la banca justifican la decisión."El actual plan de ajuste está debilitando la demanda doméstica", advierte la agencia, que calcula que el programa de austeridad de 15.000 millones de euros en los cinco próximos años, equivalentes al 9,6 por ciento del PIB, para dejar el déficit en el 3 por ciento del PIB en 2015, probablemente supondrá una considerable presión sobre las perspectivas de recuperación del país." También, a pesar de la consolidación del sistema bancario irlandés y de la mejora en sus ratios de capital, la disponibilidad de crédito al sector privado probablemente continuará limitado, añade la entidad. La agencia ve probable que Irlanda necesite más medidas de ajuste para cumplir sus objetivos y condiciona su rating a la evolución de la economía y al ajuste fiscal. Cree que la financiación al sector privado seguirá siendo limitada. Moody's considera que las finanzas públicas también pueden sufrir por la subida de los tipos de interés desde el Banco Central Europeo (BCE). Aún así, destaca que el potencial de crecimiento sigue siendo más elevado que en otras economías. Moody's citó la posibilidad de que, en consonancia con las recientes propuestas de Gobiernos de la UE, se pida la participación de los acreedores privados como condición previa para la concesión de ayuda adicional a Irlanda. "La posibilidad de que cualquier forma de participación del sector privado en el alivio de la deuda es negativa para los tenedores de deuda soberana. Este es un factor clave para la agencia a la hora de calificar la deuda soberana en la zona euro", indica de esta manera la institución. El mercado de divisas ha sido de los primeros en acusar los efectos de la bajada de calificación. Sin ir más lejos el tipo de cambio del euro frente al billete verde ha quedado por debajo de los 1,40 dólares, al perder un 0,37 por ciento. Madrid. Todavía los mercados financieros estaban digeriendo el recorte de calificación a Portugal, que hizo el pasado 5 de julio, hasta Ba2, cuando Moody's le ha colgado el sambenito de bono basura a las emisiones de deuda de Irlanda. Concretamente, el recorte ha sido desde Baa3 hasta Ba1, con lo que bonos irlandeses se consideran títulos en los que el pago de intereses más principal están sometidos a una incertidumbre considerable. Moody's explica que esta rebaja se toma por el deterioro de las finanzas públicas y las pobres perspectivas macroeconómicas del país. Además, considera que la incertidumbre creada por las pruebas de estrés de la banca justifican la decisión."El actual plan de ajuste está debilitando la demanda doméstica", advierte la agencia, que calcula que el programa de austeridad de 15.000 millones de euros en los cinco próximos años, equivalentes al 9,6 por ciento del PIB, para dejar el déficit en el 3 por ciento del PIB en 2015, probablemente supondrá una considerable presión sobre las perspectivas de recuperación del país." También, a pesar de la consolidación del sistema bancario irlandés y de la mejora en sus ratios de capital, la disponibilidad de crédito al sector privado probablemente continuará limitado, añade la entidad. La agencia ve probable que Irlanda necesite más medidas de ajuste para cumplir sus objetivos y condiciona su rating a la evolución de la economía y al ajuste fiscal. Cree que la financiación al sector privado seguirá siendo limitada. Moody's considera que las finanzas públicas también pueden sufrir por la subida de los tipos de interés desde el Banco Central Europeo (BCE). Aún así, destaca que el potencial de crecimiento sigue siendo más elevado que en otras economías. Moody's citó la posibilidad de que, en consonancia con las recientes propuestas de Gobiernos de la UE, se pida la participación de los acreedores privados como condición previa para la concesión de ayuda adicional a Irlanda. "La posibilidad de que cualquier forma de participación del sector privado en el alivio de la deuda es negativa para los tenedores de deuda soberana. Este es un factor clave para la agencia a la hora de calificar la deuda soberana en la zona euro", indica de esta manera la institución. El mercado de divisas ha sido de los primeros en acusar los efectos de la bajada de calificación. Sin ir más lejos el tipo de cambio del euro frente al billete verde ha quedado por debajo de los 1,40 dólares, al perder un 0,37 por ciento.