El Gobierno está "molesto" con el banco francés por comunicarle tarde su ofensiva sobre el españolmadrid. Estaba claro. El desembarco de Crédit Agricole no podía ser tan cándido. Por mucho que se empeñara su servicio de prensa el pasado lunes en negarlo, ni el mercado ni la dirección, así como los empleados de Bankinter, se lo creían. Sólo han pasado seis días desde entonces, y el banco francés ya ha anunciado que pretende llegar al 29,99 por ciento en su homólogo español. Fue ayer mismo cuando envió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) una copia de la solicitud remitida al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, con el citado requerimiento. De esta forma, Crédit Agricole "contempla, en este momento, la adquisición de acciones adicionales de Bankinter sin llegar a adquirir el control de dicha entidad", es decir hasta donde permite la regulación sobre opas, que marca el límite en el 30 por ciento. Estas compras se harían "en un periodo de tiempo que no excedería del 31 de marzo de 2008". En la misiva demanda también autorización para adquirir el 20 por ciento que ya tiene apalabrado, de lo que tres cuartas partes pertenecían a Ramchand Bhavnani. Su propósito, una vez que consiga la pertinente autorización del regulador, es "atender los compromisos contraídos con el inversor privado con el que se ha firmado el contrato de compraventa para esa participación", es decir, el empresario de origen indio. Enfado del Ejecutivo español Por otra parte, el Gobierno aseguró ayer estar "molesto" con Crédit Agricole por no haberle comunicado con la suficiente antelación su ofensiva inversora sobre Bankinter, que le ha permitido hacerse ya con un 19,54 por ciento del mismo, según informa Ep que cita fuentes cercanas a Moncloa. Estas mismas fuentes subrayaron que la operación fue notificada a la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno tan sólo un día antes de materializarse, "cuando ya estaba todo cerrado". Al parecer, desde el Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero no se cuestiona esta inversión porque no tiene intención de interferir en las decisiones de las empresas, pero considera que la toma de casi un 20 por ciento en el capital del sexto banco español y la intención de alcanzar el 29,9 por ciento deberían haber sido transmitidas con mayor antelación. "El Gobierno merece tener información sobre una operación de este calado en adecuado tiempo y forma", concluyó. También contrariado se mostró el pasado lunes el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, que hizo hincapié en la elevada presencia pública en el capital de Crédit Agricole. "Es un elemento que siempre genera alguna duda", argumentó. Sin embargo, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, consideró también ayer que Crédit Agricole tiene solvencia y "fortaleza suficiente" para elevar su participación en Bankinter sin que esto entrañe riesgo para ninguna de las dos entidades. Preguntado al término de su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Senado sobre si tenía constancia de que Crédit Agricole hubiera pedido permiso al Banco de España para elevar al 30 por ciento su participación en Bankinter, Fernández Ordóñez afirmó: "Creo que sí, seguramente sí".